Cuando a principios de la década 80, el ex presidente de Estudiantes ingeniero Jorge Artundo sorprendió con la incorporación de Nathan Hill y Steve Earl McDonald y conseguir así que los dos primeros jugadores de básquet extranjeros en pisar suelo “imperial” hayan vestido la casaca “celeste”, hoy el club se encuentra en un nuevo proceso que tiene los mismos objetivos, crecer deportivamente y llegar lo más alto posible.
Dice un proverbio ruso, “Las grandes obras las sueñan los genios locos, la realizan los luchadores natos y la disfrutan los felices cuerdos y la critican los inútiles crónicos”, y muchos asocian esto con obras de infraestructura, cuando en realidad, la obra de construcción social es uno de los pilares de equidad que tiene toda comunidad.
La introducción corresponde, porque desde hace 10 años un técnico foráneo no tenía continuidad en la dirección técnica de básquet, fue en 1998 cuando el villamariense Norberto Yañez dirigió a Acción Juvenil. De allí hasta la temporada anterior de Liga Nacional B de Básquet, alternaron técnicos nacidos en Río Cuarto y fue una vez más Estudiantes quien trajo un foráneo para conducir un nuevo proceso.
Con sus 37 años, casado y con dos hijos, Javier Bianchelli tiene “chapa” en el mundo del básquet. Nacido en Mar del Plata, jugador y técnico de Quilmes de la ciudad portuaria, cuando llegó a Río Cuarto para dirigir la Alianza Acción Juvenil – Estudiantes en la Liga Nacional B –venía del TNA de dirigir a Argentinos de Junín-, mostró personalidad, pero no encontró los resultados esperados. Si sorprendió que el proyecto que le comentó la dirigencia de Estudiantes lo haya entusiasmado y así desarrollar su trabajo en la entidad de la Avenida España.
“Cuando llegué a Río Cuarto encontré un club en formación, sin inferiores, pero con un proyecto lindo para desarrollar”, comenzó reflejando Bianchelli en diálogo con Al Toque Deportes y continuó: “Cómo entrenador yo comencé la escalera al revés. Mi tarea se inicio como asistente tècnico en Liga A y después salte a dirigir el plantel profesional de Quilmes”.
Al analizar el básquet riocuartense sostuvo: “hay muchas cosas por hacer y considero que la dirigencia la está realizando. Se vive un lindo ambiente entre los clubes participantes, pero estoy seguro que se puede mejorar mucho más”.
Lo que más lo entusiasma, se nota en su tono muy amable de voz es cuando habla de Estudiantes: “coordino todas las categorías formativa y me toca dirigir cadetes. Me contaba que este es el primer año que se hace play off en las categorías formativas y la satisfacción es que en el cruce viajamos a Villa Dolores en categorías preinfantiles, infantiles y cadetes y conseguimos tres victorias, eso nos marca crecimiento porque cuando viajamos en el Apertura habíamos cosechado derrotas”.
Más aún se entusiasma con el provincial de clubes que está a punto de comenzar: “sabemos que será un torneo muy competitivo y difícil. Cuando hablamos con Walter Garello –el dirigente de Estudiantes al frente del proyecto básquet-, sabíamos que yo había solicitado los elementos como para conseguir objetivos importantes y por eso hoy podemos decir que contamos con un plantel muy competitivo. Tengo una plantilla con 10 jugadores para hacer una buena rotación, hecho que nos acerca mucho a estar antes del inicio del campeonato con buenas perspectiva en la competencia”.
Los amistosos, ahora ante Instituto de Córdoba el domingo, el próximo miércoles en Marcos Juárez ante Argentinos, son los partidos que ya están confirmados. El debut en el provincial de clubes se viene: Javier Bianchelli lo espera ansioso y Estudiantes también, porque el “celeste” no quiere ser sólo fútbol, en básquet quiere trascender como fue en años de glorias para el baloncesto en la Avenida España.
Redacción Al Toque