Antes de iniciar el partido, el árbitro Sergio Victorino se dirigió hacia el arco que da al piletón y que en el primer tiempo fue defendido por el arquero visitante Máximo Meneguzzi. Regresó al centro de la cancha donde le entregó una piedra -de importante tamaño- al Jefe del Operativo. “Esto arrojó la parcialidad local”, dijo el juez al responsable de la seguridad. Rápidamente el experimentado Omar Bogni habló con los hinchas y dos uniformados fueron custodiaron el sector, con las garantías brindadas comenzó el encuentro. Según se informó, en total 28 efectivos policiales estuvieron avocados al operativo cuyo resultado fue positivo. Al margen del altercado, no pasó nada y todo fue una fiesta.
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Redacción Al Toque