El estadio 9 de Julio explotó de júbilo en una nueva edición del clásico de la ciudad entre Atenas y Estudiantes, lástima que los encuentre en el torneo Argentino B. La hincha local ubicada en la cabeza que da a la estación de servicios exhibió un gran telón blanco con la leyenda “El Albo Manda”. La gran bandera estuvo acompañada por papelitos y bengalas de humo para recibir a sus jugadores cuando el reloj anunciaba las 17 horas. En frente, la cabecera que da a las canchas de tenis se tiñó de celeste gracias a las banderas y a los globos que decoraban el apoyo de Estudiantes a sus jugadores.
Fuera del estadio había muchos espectadores, como es habitual en la cancha del “albo”. Los balcones y las terrazas son blancos predilectos a la hora de seleccionar un buen lugar para ver el parido. Pero la atención acaparada hizo que hasta un tanque de agua sea usado para presenciar el clásico.
El operativo policial no tuvo complicaciones y los cien efectivos policiales realizaron su tarea de manera normal. Otro gran mérito del público.
Fotos: Al Toque
Redacción Al Toque