Una multitud
Cerca de tres mil personas coparon el estadio de Toro Club. Previo al inicio del partido ya se habían agotado las entradas anticipadas puestas en venta en la sede de la entidad “azulgrana”. La tribuna mayor se observó repleta al igual que el sector detrás del arco que da al acceso principal. Además se observó la presencia de muchos espectadores provenientes de la región. El “albo” contó con un fuerte apoyo de simpatizantes que -con banderas y algunas bengalas- alentaron todo el encuentro. En total 43 efectivos policiales controlaron sin inconvenientes la seguridad de los espectadores.

Tribuna alternativa
La parcialidad visitante se ubicó en una tubular situada en el lateral este del campo de juego debido a que aún faltan detalles en la nueva tribuna construida detrás del arco que da a la cancha de rugby de Buitres Rugby Club.

Reformas al por mayor
Toro Club realizó una gran inversión en su predio. Se pudo observar la construcción de un nuevo tapial perimetral en el lateral este del complejo deportivo y detrás de la nueva tribuna. Las se ampliaron las boleterías en la entrada principal y se reubicaron las bocas de expendios visitantes. Además se culminaron los trabajos de pintura y cartelería en la zona de vestuarios. En los próximos días se colocarán dos torres con luminarias para corregir hasta aquí el único déficit que posee el estadio moldense.

Un sentido minuto de silencio
Previo al pitazo inicial se respetó con absoluto respeto un minuto de silencio por el reciente fallecimiento de la madre de Jorge Alturria, circunstancia por la cual no jugó el defensor. Además, Atenas exhibió una bandera respaldando a su compañero en este mal momento.

Golpe y preocupación
Pasado el cuarto de hora Bernardo Gagnolo se retiró del partido producto de un fuerte golpe al caer en el piso luego de saltar con Fabricio Gribaudo en busca del balón. En principio, el defensor no posee una lesión ósea en el hombro derecho pero no descartan que se trate de un inconveniente ligamentario en ese sector.

Un regreso esperado
Diego Armando Heredia volvió a la práctica oficial luego de 67 días de inactividad debido al desgarro sufrido en el partido final jugado ante Lutgardis Riveros que coronó campeón del Apertura a Alianza. Aquel encuentro fue disputado el 22 de julio.

No puede fuera de casa
Atenas perdió su segundo compromiso jugando en condición de visitante. En el debut el “albo” cayó 3-0 ante Deportivo Guaymallén y el viernes por la noche sucumbió ante Alianza. Además, el equipo de Drago no convirtió a domicilio cuyo último éxito se remonta al 20 de noviembre de 2011 cuando superó tres a uno a Sarmiento de La Banda.


Fotos: Al Toque
Redacción Al Toque