Gerardo Salorio, miembro del cuerpo técnico de José Pekerman durante su paso por las selecciones juveniles argentinas, desarrolló en Río Cuarto actividades teóricas y prácticas sobre la formación de los niños en el fútbol. En medio de esas tareas, se tomó el tiempo para dialogar con el programa "Así son las cosas en la radio" de FM Góspel y realizó un análisis de distintas cuestiones del fútbol actual. Sobre la violencia en el fútbol infanto juvenil opinó que los docentes deben trabajar para que lo que sucede con los padres afecte lo menos posible. Por otro lado, declaró que va a ser muy difícil reemplazar la figura de Julio Grondona y alabó la figura de Pablo Aimar.

¿Cuál es el análisis que usted hace de la preparación del futbolista hoy en la Argentina? ¿Hemos retrocedido?
Yo no diría que hemos retrocedido, sino que los otros han avanzado y nosotros nos hemos quedado. Cuando se queda quieto en un lugar o sigue marcando el mismo tiempo de vuelta con su auto y el de atrás viene descontando de a un segundo por vuelta es probable que lo alcance o lo supere. Creo que estamos en ese momento y en algún momento estuvimos por encima del tiempo del resto. En otro momento lo perdimos a ese tiempo y estuvimos dos sub 20 sin jugar mundiales. Ahora nos hemos recuperado y tuvimos un título en la sub 17 a nivel sudamericano, que ha dejado una base para la próxima sub 20. Estamos rearmando el área de juveniles que no es fácil, que lleva su tiempo, son unos 5 años.

¿Se puede consolidar un proyecto a nivel mayores a través de un buen trabajo en juveniles?
A nivel clubes cualquier proyecto corre riesgos, porque si a usted viene y le ponen sobre la mesa 8 millones de euros usted vende la joya más preciada que tiene. Si hablamos de selecciones creo que las pruebas están a la vista. La camada que fue campeona del mundo se formó entre 2001 y 2007. Ahora lo que hay que preocuparse es de formar una nueva que reemplace a esta camada. Yo creo que podemos quedarnos tranquilos para el próximo mundial, pero si tenemos que preocuparnos para el del año 2022. Ahora, en los clubes, generalmente es más difícil porque a la larga tenes que vender.

En el caso de la selección y de la idea de Martino, ¿aporta algo más que el técnico de la mayor se entrometa?
No está mal que el que esté arriba mire lo que se está haciendo abajo, en algún momento se va a tener que abastecer de eso. De todas maneras yo no he hablado con el señor Martino para saber cuál es su idea, por eso no puedo opinar de eso.

¿Qué cuestiones pueden cambiar en el fútbol después del fallecimiento de Grondona?
No es fácil reemplazar a una figura como la de don Julio. Era 6 personas en 1. Yo me acuerdo que charle con gente de la Federación Española de Fútbol y me decían: "El castellano en la FIFA no se hablaba por España, sino por él". En Conmebol tuvimos siempre un peso muy importante, manejaba las finanzas de FIFA, cuando hubo que pedir algún adelanto y demás nunca hubo problemas. Es difícil reemplazar a alguien que peleaba desde Sudamérica y mantenía los 5 cupos para el mundial y ahora los europeos se van a venir por un cupo más. Esto en un país presidencialista como el nuestro genera otras cosas. Ahora, si vamos a mejorar el fútbol argentino yo no lo sé, yo vi que mucha gente que se candidateaba y ahora no está tan segura de asumir ese rol. Ese sillón es un sillón que quema porque hay que tomar decisiones. En muchos sentidos implica una pérdida, por ejemplo en la vicepresidencia de FIFA. Yo me acuerdo estar antes de un partido y tener tres ternas posibles y que él te dijera cual querías y que, no te digo siempre, pero a veces conseguía eso.

¿Cómo se trabaja con los padres en el fútbol juvenil? ¿y con las presiones que les imponen a los chicos?
Es un problema muy grave. El otro día realicé un escrito en mi página que era "Educar y enseñar", educar no es lo mismo que enseñar. Enseñar, enseñamos nosotros, enseña el docente y lo hace dos horas, tres horas, educar lo hacen los padres. Hoy por hoy, en la sociedad está engendrada la violencia. El jugador de fútbol viene de ahí y por ende es violento. Se ha perdido sentido de la autoridad, hoy vemos un policía o un político y ya no se le tiene respeto, ellos sabrán porque la habrán perdido, pero se ha perdido en general. Eso hace que sea mayor el desafío, pero nosotros tenemos que trabajar con eso y tratar de formar al chico como persona. Una de las cuestiones que tenemos que entender nosotros como docentes, que a veces los padres no lo hacen, es que el chico no es un grande pequeño, es un niño. Yo siempre digo formemos hombres que los jugadores de fútbol vienen solos.

No puedo evitar preguntarle sobre Pablo Aimar, ¿cree que Pablo pudo haber llegado a ser más si no hubieran existido las lesiones?
Pablo es un gran jugador y creo que también es una persona que toma decisiones de acuerdo a como se siente él y su familia. De esa manera eligió los clubes a los que fue y con quien jugaba. Siempre privilegió rodearse de sus amigos. Creo que quizás le faltó ese instinto asesino que tienen algunos para querer llegar siempre a más sin importarle algunas cosas. El privilegió otras cuestiones que tienen que ver con su forma de ser. Hoy por ejemplo está siendo muy honesto con River, no iba a ir un club sin saber que no iba a poder estar al 100%, es un gran jugador y se ha manejado siempre de acuerdo a sus convicciones y eso es muy respetable.

Redacción: Al Toque
Foto: www.gerardosalorio.com