Inicio Quiénes somos Publicidad Contacto Enlace a Facebook Enlace a Instagram Enlace a Youtube Enlace a Twitter
  • PRIMERA A

    Final

    Renato Cesarini 13 Toro Club (CM)
    CRC TCSD

02-02-2009 13:23

El sello de un jugador distinto

Nicolás Alberto Gatto volvió a ser el que esperaba Atenas. Una tarde-noche en el inicio del segundo mes del 2009 el delantero “puntano” se reencontró con su “distinción” el gol.
Nicolás Gatto llegó a 14 conquistas y se transformó en el goleador del Argentino B

Con sutileza y con un toque suave de goleador. Primer grito. Ocupando el lugar que debe tener un goleador en el área para capturar un rebote: Segundo grito. Con un derechazo fuerte ubicando la pelota alta en el primer ángulo del arquero: Tercer grito.

Tirandose de palomita: pelota arriba del travesaño. Encarando en el mano a mano y sacando un remate: la pelota fue interceptada por un defensor. Tratando de no ser mezquino con su “compadre” de ataque: Juan “El Cara” López y en varios pasajes encontrándose.

Este fue el reencuentro de Nicolás Alberto Gatto con su “distinción” en Atenas. Lo padeció la defensa de Juniors. Lo gozaron las casi 800 personas que estaban en la cancha del “poeta cordobés”. Lo disfrutaron los casi 200 hinchas de Atenas que se llegaron a Córdoba. Lo aplaudieron, sus compañeros, cuerpo técnico y dirigentes. Lo reconocieron, todos los trabajadores de prensa que estuvieron presentes cumpliendo su función en cancha de Juniors.

 El nombre completo de su documento reza Nicolás Alberto Gatto. Su ficha futbolística indica que Pueyrredón de Villa Mercedes, San Luis, fue uno de sus primeros lugares donde le dio a la redonda. Club Sportivo y Biblioteca Atenas, es el club que le dio y le brindó sus mayores logros.

Expresa el diccionario de la Real Academia Española, sobre la palabra distinto: “Que no es lo mismo, que tiene realidad o existencia diferente de aquello otro de que se trata”. Y Gatto expresa eso en la cancha.

No es lo mismo Gatto que otro delantero. Es diferente cuando Gatto está derecho para el arco o no. La realidad de Atenas cambia cuando Gatto está diferente de aquello otro de que se trata: por ejemplo, no encotrar el gol.

Con todos estos elogios, tal vez, piense que Atenas le queda “chico” al delantero. Y yo debo buscar las palabras del maestro Dante Panzeri para decir que “Sudando no se llega a hacer algo bien hecho. Lo bien hecho se hace por talento acompañado de sudor”.

Y Nicolás Gatto a su manera “suda”, transpira. Es un ser humano especial. Donde parece que  Atenas le dio todo, y él le devuelve alegría con su distinción de jugador.

Y justo en el primer domingo de febrero de 2009, cuando a las 19.22 apareció en el estadio de General Paz Juniors un trapo que rezaba: “Maradona, Gatto es argentino”, el la miró, sonrió con sus compañeros, y se juramentó “será mí noche”: Para cumplir ese sueño puso toda su distinción personal, y no desaprovechó las habilitaciones de sus compañeros. Porque el fútbol es un juego, y por más que muchos lo deseen mecanizar, siempre, pero siempre, desnivelarán los jugadores distintos. Gatto lo es y Atenas lo disfruta.

Y se preguntarán, Nicolás Gatto es un muy buen jugador y apelaré una vez más al maestro del periodismo Dante Panzeri: “El buen futbolista se forma mirando para abajo cuando empieza y levantando la cabeza cuando madura”. Y esa distinción, el puntano,  la tiene.

 

Carlos Valduvino - Redacción Al Toque