Forrest, Bonini, Meneguzo, Ferrochio, Imaz, entre otros, fueron los nombres para la confección de un equipo que buscase el ascenso en la Liga Cordobesa “A”. Con Javier Bianchelli a la cabeza, Estudiantes fue moteado por propios y extraños como “el” equipo a vencer. Y en un principio el palpito de muchos se cumplió. Sobre veintidós fechas que tuvo la primera fase, los riocuartenses, con irregularidades en su juego, la comandaron hasta la número diecinueve. Las dos derrotas contra su amenaza más temible, Tiro Federal de Morteros, y otra inesperada como aquella ante Pesca de Carlos Paz, terminaron por sacarle de entre las manos ese valioso Nº 1.
Estudiantes supo pronunciarse en diferentes ocasiones como el equipo de las desequilibrantes individualidades, pero tuvo severas dificultades para expresarse como un todo, como un conjunto. Ese quizás sea el primer paso que deberá dar este equipo en la escala hacia el premio mayor: el ascenso a la Liga Nacional B. Su entrenador Javier Bianchelli habla del presente y del futuro de Estudiantes en el certamen provincial.
No se cerró esta parte de la Liga Cordobesa como hubiesen deseado…
Me parece que jugamos uno de los partidos más feos en lo que va del campeonato. No hubo juego de equipo y tuvimos un bajísimo goleo, pero creo que ya pasó esa primera fase tan complicada. Nos sacamos esa mochila que se tiene en todos los inicios de torneo de ir primero o segundo, de estar pendientes de otros resultados. Eso nos desconcentró y sacó la vista del verdadero objetivo que tenemos.
¿Qué ha quedado en el debe y en el haber tras la primera fase?
Lo bueno es haber estado a la altura de la circunstancias, sobre todo al inicio, donde se vio el fruto del trabajo de la preparación que realizamos. Lo que quedó como saldo negativo es que no encontramos la regularidad de juego y que no fuimos contundentes en muchos partidos. Pero no es para alarmarse, porque si se tiene en cuenta los resultados de todos los equipos, creo que estamos muy bien de cara a lo que se avecina.
Esa presión que usted menciona ¿cree que puede haber influido?
Nosotros comenzamos a trabajar un mes y medio antes que la mayoría de los equipos, eso conlleva una acumulación de trabajo, de presión extra, que puede haber generado una relativa saturación al equipo antes de tiempo. Por suerte esa etapa ya la hemos atravesado y ahora enfrentamos cada partido como una final.
¿Cambia su modalidad de trabajo en este tipo de circunstancias?
Cambian algunas cuestiones. Trabajamos algunas cosas nuevas en el juego para que los scoutings no sean tan sencillos para el rival. Nosotros ya hace quince días que ensayamos sistemas nuevos, sin ponerlos en cancha durante los partidos para poder utilizarlos en play offs y que sorprendan al rival. Con respecto al trato con los jugadores, es el mismo, solo que le remarcamos que a partir de ahora todo es muy importante y tenemos que afrontarlo como tal.
¿Qué impresión te dejo el rival que tendrán en cuartos de final?
Argentino de Marcos Juárez es un equipo muy aguerrido y tiene una cancha chica que le ayuda a ese juego. A nosotros las dimensiones pequeñas no nos benefician porque necesitamos espacio para desplegar nuestro juego, pero en play off es a matar o morir, nos jugamos el todo por el todo y no tiene que influir ni la cancha, ni el rival, ni nada. Tiene que prevalecer la mente fuerte y fría para poder lograr el objetivo.
Argentino, el primer escollo
En cuartos de final, Estudiantes chocará con Argentino de Marcos Juarez, con quien perdió en la ultima fecha de la primera fase el pasado viernes por 64 a 61 en condición de visitante. En primera instancia, por la 11ª jornada, Estudiantes lo habia vencido en casa por 80 a 74.
La serie a mejor de tres enfrentamientos, arranca el martes 7 de abril en Río Cuarto, seguirá el viernes 10 en Marcos Juárez, y de ser necesario un tercer partido, sera en el estadio "celeste" por contar con la ventaja de localía.
Redacción Al Toque