Nació un 23 de diciembre de 1998 en Río Cuarto pero reside en Las Higueras. Incursionó en el atletismo como un hobbie que simplemente disfrutaba. Obtuvo el tercer puesto en su primer Torneo Nacional sin proponérselo decididamente. Empezó a estudiar Educación Física pero abandonó para dedicarse de lleno al salto en largo. Ese es Luciano Gabriel Ferrari, un adolescente que respira deporte desde pequeño y que sueña con participar en un Juego Olímpico.
“Siempre me gustó la actividad física. Fui al colegio La Base (Las Higueras) y daban atletismo, entre ellos salto en largo. Tenía un profesor que siempre llevaba chicos a competir a los torneos Córdoba Juega. En primer año me llevó a competir en un regional de salto en largo pero no pasé al provincial. En segundo sí me fue bien y accedí a la instancia provincial. Desde ahí me empezó a gustar. En tercer año también me fue bien pero en ese tiempo entrenaba una vez por semana y también corría pruebas de cien metros”, cuenta Ferrari.
Si bien desde el comienzo no tenía tan claro la actividad que quería practicar, Luciano tuvo que enfrentar la situación de elegir y dedicarse exclusivamente a una disciplina. “Empecé como un hobbie en el colegio, también hacía tenis, hasta que en un momento Facundo Guzmán (su profesor) me dijo: ‘o te dedicás a salto en largo o te dedicás a pruebas de cien metros’. Pero yo no quería dejar las carreras. En mayo del año pasado fui a un torneo en Mendoza en el que me salió todo mal. Ahí me di cuenta que no podía hacer las dos cosas y me puse a entrenar específicamente como saltador”.
Chaco es un lugar especial para el natural de Las Higueras. Allí inició el camino de los resultados positivos pero, en este caso, no los esperaba. “Cuando estaba en cuarto año mi mejor marca era seis metros ocho centímetros. Para mí era ¡wow, seis metros! En 2015, participé del Torneo Nacional sub-18, salté y cuando vi, había quedado tercero. Yo estaba bastante contento porque no tenía fe de meterme en un podio ya que el nivel era muy bueno. Ese torneo me cambió bastante”.
Además de la tercera ubicación en el Nacional disputado en Chaco, ese año fue campeón en salto en largo, en carreras de cien y doscientos metros del Torneo Provincial sub-18 y subcampeón de los Juegos Binacionales Argentina – Chile categoría sub-20. En el 2016, Luciano comenzó participando en las tres pruebas. En el Torneo Provincial de mayores finalizó primero en salto en largo y segundo en cien metros llanos. También se coronó en salto en largo cuando participó en el Torneo Provincial sub-23 y sub-20, y nuevamente en los Juegos Binacionales. En cuanto a los Nacionales, fue subcampeón de salto en largo en el sub-20 y en el de mayores, en el cual consiguió su mejor marca, siete metros veintisiete centímetros.
En relación al por qué se decidió por salto en largo, el joven responde: “me incliné por los resultados. Veía que en carreras de cien no me iba tan bien y decía ‘si en largo me va bien, me dedico a eso’. Las dos pruebas me gustan por igual pero el salto en largo, al tener seis saltos, lo disfruto más”. Además, y respecto a la particularidad de practicar dicha disciplina, Ferrari aduce simplemente una cuestión de gustos: “siempre me pongo a ver atletismo y es lindo. Me gustó salto en largo, es decir, creo que es algo que nace de uno”.
El hecho de dedicarse decididamente al deporte hizo que se produjeran algunos cambios en la vida cotidiana de Luciano. “Antes me gustaba el deporte pero no me enfocaba tanto y tampoco era mi objetivo. Ahora me levanto y sé que tengo que ir a entrenar y disfruto. En diciembre empecé con el nutricionista, Andrés Biasi, que me cambió bastante. Antes no comía mal pero tenía permitidos”.
En cuanto a la modalidad de preparación, el atleta de dieciocho años describe: “entreno de lunes a sábados, todos los días pista; tres veces por semana técnica de cajón, de caída, todo lo que es específico de salto en largo; técnica de carrera, velocidad. Y gimnasio hago tres veces a la semana, un solo turno y a veces doble turno”. Y sostiene: “noto diferencias de cómo me entrenaba antes y ahora. Hoy soy más consciente de lo que hago, sé lo que tengo que hacer, me doy cuenta de los errores. Por ejemplo, antes, cuando corría no me daba cuenta de lo que hacía mal. Le decía a Facundo que me advirtiera él. En cambio, ahora en un salto o cuando corro me doy cuenta de los errores”.
Lo menciona frecuentemente. Se trata de quien lo apadrinó en la disciplina que hoy realiza. Facundo Guzmán no es un nombre más para Luciano. Su profesor lo acompaña desde un tiempo y no sólo le brinda recomendaciones deportivas. “Facundo tiene el plus de haber competido varios años, haber ido a muchos torneos y siempre nos da consejos de cómo estar en determinada situación. Por ejemplo, en el Grand Prix Sudamericano de Uruguay me decía: ‘disfrutalo, no te concentres tanto en los rivales sino disfrutá’. Uno se hace la cabeza y no es lo mismo competir en un provincial que en un nacional. Cuando le agarrás la mano se disfruta”. Y continúa su reflexión:“en los últimos torneos estuve bastante nervioso por buscar la marca sudamericana, siete metros treinta centímetros. Me encerré en eso y creo que no me salió la marca por eso. En cuanto a los siete metros veintisiete centímetros, nunca pensé que iba a saltar eso, fui para disfrutar de ese torneo. Y en el último salto, sin pensarlo, salió. Creo que se trata de disfrutar y no pensar tanto en las marcas”.
El joven considera que el atletismo es bastante individual ya que si bien su profesor le puede decir lo que tiene que hacer, cree que lo demás queda en él. Sin embargo, hay una parte que, para Ferrari, debería estar presente en todo momento, el apoyo del Estado para ayudar a los deportistas. Respecto a esto, expresa: “los que tienen becas son los que han ido a Juegos Olímpicos, es decir, atletas que ya han llegado a la elite. Creo que el atleta tiene que ser acompañado en el camino, no cuando ya llegó. Son pocos los becados por la Nación. Los que están becados son los que tienen récords. Por eso creo que el apoyo no es muy bueno. Tampoco tenemos acompañamiento a nivel local o provincial. Sí me han ayudado bastante en Deportes Río Cuarto con los viajes. Si no hubiese sido por ellos no hubiese ido a Uruguay porque es lejos, costoso”.
Cuando le preguntan por un referente del atletismo, Luciano menciona a Greg Rutherford. “Me gusta su forma de saltar y la forma en que entrena. Creo que su estilo es parecido al mío. A mi edad saltaba lo mismo que yo, siete metros veinticuatro centímetros. Ocho años después fue campeón olímpico”, afirma sobre el británico. Este hecho lo lleva a decir que a largo plazo se puede llegar a un alto nivel. A partir de esto, expresa sus objetivos inmediatos y de cara a un tiempo más prolongado. “En el atletismo pienso a largo plazo. Un Juego Olímpico es un sueño pero no algo imposible. La meta de este año es saltar arriba de siete metros cincuenta centímetros. Estoy en proceso de manejar correctamente la técnica porque podés estar bien físicamente pero si no hacés bien lo técnico no sale”. Y concluye sobre sus aspiraciones: “en estos días sale la lista para el equipo sudamericano, todavía no sé si voy a estar. Es en Guyana, y al ser tan lejos es probable que lleven un equipo reducido. Si llego a ir al sudamericano, entrenaré para eso que es de acá a un mes. En caso de no ir, apunto a fin de año que están los Binacionales, Nacional sub-23 y la Copa de Mayores”.

Ficha técnica
Nombre y apellido: Luciano Gabriel Ferrari.
Fecha de nacimiento: 23 de diciembre de 1998.
Lugar de nacimiento: Río Cuarto.
Deporte: Atletismo.
Disciplina: Salto en largo.
Mejor marca: 7,27 mts.
Entrenador: Facundo Guzmán.

Fotos: Al Toque
Redacción Al Toque