Ante todo, José Sebastián Echeverría es sincero, frontal, dice las cosas de acuerdo a lo que siente. Por eso no anda con versos o artilugios parfa explicar este presente nefasto desde lo matemático: perdió todo lo que jugó. Pero al “cacho” no le preocupa tanto lo futbolístico, sino más bien la inconducta de un plantel que en tres fechas perdió a ocho jugadores por expulsiones.
“En tres fechas tenemos ocho expulsiones, esa es mi preocupación más grande. Deportivamente en cancha los tres partidos que perdimos los podíamos haber ganado. Nosotros erramos y ellos marcaron, pero tuvimos inconveniente mayores con las expulsiones”, explicó el DT del “celeste” adeliamariense.
Pero por ahora, Echeverría destaca el trabajo que no se ve a la luz de los que no conocen, que es el del ordenamiento de las estructuras dentro de la institución. Y lo explicó: “El año pasado se quedó en la última posición, este año está ocurriendo cosas distintas, por ejemplo el año pasado se vino con ocho jugadores en tercera divisón, este año vinimos con 16, no hubo que recurrir a ningún jugador de tercera para formar el plantel de primera. En eso se está logrando un orden que se había perdido”.
“Todo esto –agregó el DT- al margen de quien haya dirigido, no pasa por ahí. El trabajo más arduo fue ese, ordenar, hacer volver a chicos que no jugaban, hacer retornar a varios que se habían ido a Atlético y han vuelto, todo eso lleva a que por dos meses vaya tomando forma. Por eso digo que la cosa va bastante bien en ese sentido, al margen de los resultados y las expulsiones”.
-¿Cómo se trabaja en ese déficit que usted remarca de los expulsados?
-Es una alternativa de fácil resolución, quién cobra algo se queda sin cobrar y de que el ingresa y la cosa mejora, el que salió deberá esperar su turno. Eso es conducta ciento por ciento. Hay inconducta. Las expulsiones no vinieron en su mayoría por un cruce de un último hombre o un foul táctico, vienen de empujones, por entrar en el manoseo con el rival. De hecho la mayoría de las expulsiones han sido una de cada lado. Eso hay que cortar y me preocupa. Yo llevé dos jugadores de mi confianza que yo lleve, es el caso de Audisio y Brito, me defraudaron tontamente cuando los necesitamos en cancha.
-Y se avecina otro partido complicado ante un Santa Paula que tampoco ganó en el torneo...
-Son todos complicados, ya jugué este tipo de instancia de ascenso, son muy complicados. Te toca enfrentar rivales que si siguen en la B no les importa –salvo dos o tres, aclara-. En la A si estás abajo tenés que salvarte del descenso, si estás en el medio querés subir y si estás arriba tenes que mantenerte. Siempre se juega por algo, acá hay dos o tres que quieren subir, y nosotros somos uno de ellos porque Municipal es una institución de Primera A, que está trabajando muy bien en la faz social. Por eso creo que esto va a llegar a buen puerto cuando se terminen algunas cosas que pasan dentro del plantel y que se solucionen desde adentro.
Redacción Al Toque