Un paisaje de extensas hectáreas desoladas y espesa tierra colorada nos hacen compañía y nos dan la bienvenida. Sabemos que falta cada vez menos y las ansias no se desaniman. Es un viaje largo, un poco agotador, pero la ilusión que nos arropa lo hace encantador.
Mientras el micro que nos traslada conduce a ritmo moderado son las muchas cosas que viene a nuestro pensar y entre tanto reflexionamos: “Misiones, tierra bien nuestra, un poco lejana pero jamás olvidada”.
Seguimos viajando, los campos se vuelven más extenso, la deforestación da mucha pena y la tierra colorada ya no asombra. Las zonas urbanas son aisladas y en varios rincones del camino el “Gauchito Gil” - anfitrión de lujo por estos lugares - nos saluda indicándonos el destino. Construcciones en madera y una amplia vegetación son una constante en nuestro recorrido y cada instante nos ilustran un paisaje desconocido.
En el descanso, con almuerzo incluido, los rostros denotan cansancio pero en ellos se trasluce el entusiasmo. Después de una comida disfrutable, con mandioca y mamón - frutos típicos de la región – como platos a elección, partimos con la ilusión renovada rumbo a Posadas.
Después de 17 horas de viaje, el río Paraná nos recibe con sus aguas resplandecientes. Estamos en Posadas, porque la pasión por el fútbol nos trajo a este lugar, ahora es momento de disfrutar.
Mañana, desde las 15:30 - a las 13:00 comienza la transmisión de Al Toque por la 103.5, los 40 Principales - podremos palpitar el encuentro entre Crucero del Norte y Asociación Atlética Estudiantes por la primera final del Torneo Argentino B. Y nosotros, gracias al esfuerzo de nuestra cooperativa de trabajo,a ustedes, se lo podremos contar.
Marcelino Gasseuy - Redacción Al Toque