Por Carlos Alberto Valduvino (*)
Asociación Atlética Estudiantes está atravesando un gran momento deportivo en el torneo Federal A que organiza el Consejo Federal del Fútbol Argentino. No sólo desde lo deportivo, sino desde lo que un deportista de alta competencia debe saber complementar: la concentración en el juego para no perder perspectiva de lo que se está jugando.
El inicio de esta opinión puede significar una abstracción a lo mucho que corre por las venas en un partido de fútbol donde lo más importante no es la belleza del desarrollo del juego, sino la efectividad a la hora de sumar puntos y conseguir objetivos.
Con el triunfo obtenido ante Unión de Villa Krause –en Río Cuarto, en la primera rueda, habían empatado 0 a 0- por 1 a 0, gol convertido por Martín Abraham, Estudiantes no sólo se afianzó en zona de clasificación, sino que además se ubicó en el segundo lugar con 24 unidades y detrás de Gimnasia y Esgrima de Mendoza que, tras derrotar a Desamparados de San Juan por 2 a 0, al término de la decimocuarta fecha, ya está clasificado para la fase campeonato que comenzará a fines de enero.
Seguidilla de partidos
Comenzó el sprint final de la fase clasificatoria. Y el martes por la noche en el estadio “Ciudad de Río Cuarto – Antonio Candini” disputará el partido decisivo de esta etapa clasificatoria.
Desde las 21.30 recibe a San Lorenzo Alem de Catamarca con el arbitraje del nicoleño Fernando Oscar Marconi, quien tendrá como asistentes a Matías Coria, de Cañada de Gómez, y Víctor Manuel Mora, de Concordia.
Estudiantes acumula 24 puntos en 14 partidos jugados, tiene una efectividad del 57,14 de los puntos obtenidos. Es un rendimiento desde lo estadístico, que le da tranquilidad al técnico Marcelo Vázquez cómo para ir buscando variantes en su largo plantel para tratar de conformar el mejor once titular de acuerdo con lo que observa en el trabajo en la semana.
No hay escusas. Así como hasta la quinta fecha de la primera rueda, el técnico no lo había encontrado y no le llegaba a sus jugadores sobre lo que pretendía del equipo dentro del campo de juego, con nueva fechas ya recorridas, Estudiantes ganó en solidez y en esta seguidilla de partidos tiene la posibilidad de abrochar en las próximas dos jornadas la clasificación para la próxima instancia.
Si eso sucede, estará con el primer objetivo cumplido. Será uno de los 16 equipos que buscarán el primer ascenso a la Primera B Nacional para la próxima temporada.
En este sprint final recibe a San Lorenzo, visita el sábado a Deportivo Maipú, en la penúltima viaja a San Luis para medirse con Juventud Unida Universitario y cierra en su cancha ante Unión Aconquija.
Decisivo y debe ser con clima de final
Los números son elocuentes. El martes, Estudiantes juega uno de esos partidos que se contextualizan como decisivos para cumplir un objetivo, pero que debe estar rodeado con un clima de final.
Sobre el primer de los aspectos, y si la planilla de llevar las tarjetas amarillas de los jugadores “Celestes” es correcta, Alan Vester y Marcos Lamolla habrían llegado al límite de cinco amonestaciones, por lo que no estarían el martes por la noche, pero si volverán para disputar los dos –de los tres- partidos más trascendentes que tiene que afrontar en condición de visitante: ante Maipú y Juventud de San Luis.
Dos bajas importante en la estructura defensiva de Estudiantes y un hermoso desafío para el técnico Marcelo Vázquez a la hora de definir quiénes serán los reemplazantes de dos jugadores –Vester y Lamolla-, que hasta ahora están marcando diferencia en el juego, ambos con características muy distintas pero con cualidades individuales de sobra para ser la dupla de centrales.
Y debe estar rodeado de clima de final, porque el equipo ya necesita definitivamente sentir el apoyo del público.
Es cierto, en tiempos donde no es fácil conseguir el dinero para abonar una entrada, Estudiantes lo planificó para que sea más accesible para el “futbolero” con la posibilidad de ser socio de la institución y, con ello, conseguir desde lo económico un aporte de flujo de fondo constante y, además, asegurarse un piso mínimo –que por ahora es muy bajo- de cantidad de espectadores en el estadio cada vez que juega de local y a un valor económico accesible para el nivel de competencia en el que está inmerso el “Celeste” de la Avenida España.
Hay mucho en juego. En una noche sanjuanina apareció un tal Abraham para poner el 1 a 0 en el estadio “Del Bicentenario”. Afianzó conceptos, sigue corrigiendo errores en el juego y, lo que es más trascendente, el equipo muestra una identidad.
El martes a las 21.30, el público futbolero de Río Cuarto y región debe dar su veredicto. O seguirá siendo apático como hasta ahora y se sumará recién en el momento que el carro esté llegando muy cerca de disputar cosas mayores, o ya desde ahora comenzará a ser protagonista, con más de 5.000 personas en el escenario. Dirigentes, cuerpo técnico y jugadores vienen cumpliendo y con crecer. ¿La afición futbolística responderá de la misma manera?
(*) Periodista Deportivo
Foto: www.aaestudiantes.com.ar