Mucha gente viajó a la ciudad de Río Cuarto con las ansias de la vuelta, tras siete años, de Independiente Dolores a la elite de nuestro fútbol. El final no fue el esperado y la gente de la “furia roja”, junto a Alejandro Ábalos, entrenador del equipo, conocieron la desilusión en primera persona. El DT riocuartense deja impresiones sobre la llave que dictaminó el ascenso de Universidad Nacional pero, también, no pierde la oportunidad para comentar sobre su futuro laboral.

Más de 300 personas presenciaron el juego disputado en el campus universitario; ellos llegaron con la misma ilusión de los dirigentes, jugadores y cuerpo técnico. Ábalos detalla los sentimientos, una vez concluido el partido: “La gente y los jugadores venían ilusionados, pero esto es fútbol e Independiente Dolores tendrá revancha, hay buen material”.

- ¿Cuáles fueron los motivos de la derrota?

- Nos jugó una mala pasada el calor, nos ahogamos a los diez minutos y sumado a eso, las expulsiones. Universidad Nacional pudo hacer su trabajo y fue superior a lo largo de los 90 minutos. También puede ser que hayan influido los nervios de los más chicos.

- Con el resultado fijado, ¿se realiza algún reproche en cuanto al planteo táctico y el equipo que paró en cancha?

- No, para nada. Es una locura jugar estos dos partidos en una semana, la mayoría de los jugadores trabajan y no se pudieron recuperar.

- ¿Esperaba vivir este momento con Independiente Dolores?

- La verdad que antes que me llamarán de General Cabrera, tuve dos propuestas pero nunca dudé en elegir Independiente Dolores. Sabía el material con el que cuenta el club y, además, la idea de los dirigentes era pelear el ascenso.

- ¿Continuará en la entidad “roja”?

- Yo había hablado con los chicos, mi decisión es no continuar. Fueron tres meses de trabajo intenso y, lo que vivimos en este tiempo, muchos entrenadores lo viven en un año.

Alejandro Ábalos, para concluir la entrevista, deja un mensaje a la gente de Independiente Dolores: “Deben seguir trabajando, tanto dirigentes como jugadores. El fútbol siempre da revancha y aquí está a la vuelta de la esquina. Quiero agradecerles a los jugadores por la entrega y a los dos dirigentes que estuvieron a mi lado.

“Nos vamos con la cabeza en alto”

La frase pertenece a Pablo Irazoqui, capitán del equipo y, según el entrenador Alejandro Ábalos, el técnico dentro de la cancha. El volante central de Independiente Dolores, con tristeza por la derrota pero con suficiente madurez, explica los motivos de la caída, muestra malestar por el arbitraje y, también, comenta la decisión en cuanto a su futuro.

“Estamos con bronca, uno siempre quiere ganar las finales. Pero en el partido se fueron dando distintas situaciones. Cuando quedamos diez contra diez se emparejó pero luego sufrimos otra expulsión que es nuestra responsabilidad. En los penales luchamos hasta el final pero no se dio. Nos vamos con la cabeza en alto. El equipo dejó todo”, describe.

El capitán del “furia roja” analiza la derrota en la llave final por el segundo ascenso: “Fueron dos partidos parecidos. En esta final (la revancha), nunca nos pudimos encontrar en el campo de juego pero ahora es tarde para lamentarse”.

Irazoqui, en sintonía con la parcialidad de General Cabrera, mostró fastidio por el arbitraje de Matías Ramos. Ante el tema, el mediocampista detalla: “Nos vamos molestos. Un árbitro de la categoría que él tiene no llevó bien el partido. Nos trató mal durante los 90 minutos, siempre de mala manera. Se lo dije en la cara, la jugada del penal solo él la vio”.

Por último, Pablo Irazoqui sale de la final perdida y comenta sobre su carrera futbolística, ligado a otra institución: “Terminé hoy acá y voy a seguir en Ateneo Vecinos, en el próximo Torneo Federal C”.

Foto: Al Toque

Redacción Al Toque