Siempre es repudiable todo acto de violencia se pueda generar en un campo deportivo. Por eso que se repudian los incidentes sucedidos en el Barrio Santa Rosa sobre el final del partido entre Municipal y Herlitzka, que no hacen más que empañar el normal desarrollo de un certamen que recapituló una escena indeseable más.
Todo sucedió cuando Sportivo Municipal llegó a la igualdad (polémica porque había supuesto off side) a los 50’ y fracción del complemento. Entre el festejo alocado de los jugadores “comunales” y las protestas hacia el árbitro de los jugadores vertientistas se suscitaron encontronazos entre los simpatizantes de la “M” y los de la “H”, en el sector en donde estaban ubicados los visitantes. Sea por la causa sea, nada justifica lo que aconteció segundos después del empate polémico del equipo de Rubén Pezzella. Lo cierto es que se sumó una nueva página negra que todos repudian. “Eso que pasó entre los hinchas le hace muy mal al fútbol, nadie está expuesto a que pase eso. Yo ya estoy acostumbrado, de visitante o local, tengo a los visitantes en la espalda y todos los partidos nos insultan, escupitajos, uno está curado pese a que no hace mucho que dirijo, pero te tenes que adaptar o terminas peleando con todo el mundo”, dijo el entrenador de Municipal.
Por su lado, Hugo Vicario, DT de Herlitzka, dijo que “en lo deportivo perdimos dos puntos, pero lo que pasó fuera de la cancha no se entiende, es gravísimo. Porque la gente de Municipal en vez de festejar el gol se fue a agredir a la gente de Herlitzka. No entendemos cómo se llegó a todo eso. Cuando la gente de Herlitzka se acercó para protestar contra el árbitro la posición adelantada y el tiempo de exceso pasó todo”.
El orientador táctico de la “H” además criticó el arbitraje de Héctor Juárez Ortega, quien –a su consideración- convalidó un gol en claro off side y después del tiempo adicionado: “Hubo posición adelantada de varios jugadores de Municipal en el empate. Segundo extiende el tiempo de juego sin causas válidas. En el último cambio agrega un minuto más de los 4’ que había descontado y no hubo demoras en el cambio. Juárez Ortega hizo vista omisa al terrible empujón que le hicieron a Colombo”. “Y el gol –sigue contando- llega a los cincuenta minutos, treinta segundos, yo lo estuve cronometrando. Entonces ya se había excedido el minuto demás que había dado el árbitro, no sé porque no finalizó antes el partido cuando sacamos un pelotazo nosotros hacia al área de ellos. Permitió que el arquero de Municipal volviera a sacar la pelota para nuestro lado y eso nos molestó porque creíamos que el partido estaba terminado”.
Por su lado, Pezzella relativizó la actuación del juez: “En la vida hay que aprender a ganar, perder y empatar. A nosotros ya nos pasó algo similar con Riveros, el árbitro había dado minutos de descuento y nos empatar. Pasó después en Las Vertientes, Boccolini nos cobró un indirecto, el arquero la dejó pasar y ahí se desató todo. Perdimos el partido y nadie dijo nada, ningún árbitro lo hace con maldad, pueden ser errores”.
Redacción Al Toque