Luego de un empate con sabor a derrota en un partido que no terminó -fue suspendido a los 46 del segundo tiempo- y con Luis Lobo Medina como protagonista principal, Marcelo Vázquez deja sus sensaciones tras el cotejo de Estudiantes ante Central Córdoba de Santiago del Estero. El director técnico enumera una serie de situaciones en donde el colegiado influyó para el normal desarrollo del choque disputado en las últimas horas del sábado en el estadio “Ciudad de Río Cuarto - Antonio Candini”.

“Es duro, sinceramente no pueden pasar estas cosas, te quitan las ganas de trabajar, la ilusión de un año”, así inició Marcelo Vázquez la charla luego del partido, que no finalizó, entre su equipo y el elenco “ferroviario”. Además, agregó: “fue una burla, quedó evidenciado, toda la cancha lo vio”.

El entrenador mendocino definió la situación que le tocó vivir como única en su carrera como DT: “estábamos todos ilusionados, pero nos robaron descaradamente. No me pasó nunca, no hay necesidad”. Vázquez siguió dejando su parecer de la labor del árbitro: “no soy de hablar de ellos, pero hoy me dijo que a lo mejor no dirigía más por lo que pasó. Igual, ellos tienen las de ganar con el informe que realizan”.

En otra parte de la entrevista, el orientador táctico del conjunto de la Avenida España remarcó sobre lo perjudicial que son los árbitros en este pentagonal: “no hay transparencia, el DT de Villa Ramallo (Héctor Storti) habló anoche de lo que pasó en San Luis. Nos tocó aquí pero podría haber sido en otro lado o cuando visitemos a Juventud Unida. Ya se conoce quien va a ascender”.

- ¿A quién cree que favorecen?

- No lo sé, anoche no era para favorecer a Juventud Unida. Teníamos una ilusión y nos robaron. Se burlan con el informe, mientras cenan lo hacen y se te ríen en la cara.

- ¿Ustedes intuían que esto sucedería?

- Si, lo sentíamos. Siempre nos dirigió bien, pero hoy nos robó descaradamente. Todos los pibes llorando. En Ramallo nos ganaron bien y lo dije después del partido. Hoy fuimos ampliamente superiores, pero desde el arranque le sacó una amarilla Comba que tenía cuatro y las otras a los chicos que estaban al límite. Sentimos un robo premeditado.

En el epílogo de la entrevista, Marcelo Vázquez trató de llevar tranquilidad y anexar una cuota de ilusión: “estoy calmo pero dolido, salieron todos los chicos llorando. Quédense tranquilos que tenemos otra vida y el jugador de Estudiantes tiene dignidad y amor propio, y hoy lo demostró”.

Foto: Al Toque

Redacción Al Toque