El pasado domingo, Juan José Irigoyen regresó a un lugar muy sentido por el DT por los logros obtenidos. Su retorno a Coronel Moldes dejó una doble sensación en el final de la visita del “Jota”. Por un lado, la alegría de reencontrarse con muchos viejos amigos y, por el otro, la desazón de una derrota en tiempo adicional.
“La verdad es que hacía tres años que no venía a Moldes, dirigí mucho tiempo a Toro acá y es una ciudad que siempre me recibió muy bien y tengo muchos amigos”, manifestó Juan en relación a su visita a la localidad moldense.
A lo que agregó, tras la derrota 2-1 de Riveros en manos de Alianza. “A la vez, honestamente me voy mal porque nosotros necesitábamos el resultado pero me voy la conciencia tranquila porque lo que jugó el equipo hoy (por domingo) es espectacular. Los felicité uno por uno, les dije que levanten la cabeza, pero no es fácil para un jugador de fútbol perder, yo fui jugador y no es fácil”.
Con respecto al trámite del juego, Irigoyen ponderó el trabajo realizado por sus dirigidos: “Estoy muy contento porque trabajaron bárbaro con la pelota, creo que nos faltó más tranquilidad a la hora de definir sino hubiéramos hechos uno o dos goles más, pero esto es fútbol”.
Pese a la racha negativa y a la ubicación lindera a la zona baja de promedios de Riveros, el DT del equipo gigenense dejó en claro su apoyo incondicional hacia el plantel y su proyecto de trabajo. “Lo único seguro es estoy a full con mis jugadores, los dirigentes y el club Riveros que año tras año vienen trabajando para hacer fútbol con mucho tesón pero estos son sogazos fuertes”.
Por último, Juan Irigoyen explicó las consecuencias de la derrota (sumada a la mala actuación del árbitro César Fait) que denominó “sogazos fuertes”. “Perdimos puntos importantes dentro nuestros objetivos, Riveros pasó momentos difíciles el año pasado donde jugó una promoción y eso no es fácil. Mi trabajo junto a Diego (Mirez) y Claudio (Lanza) es sumar y hoy (por domingo) era uno o tres puntos que servían mucho”, concluyó.
Redacción Al Toque