“Tarda en llegar,

y al final, al final,

hay recompensa,

en la zona de promesas”

(Zona de promesas – Gustavo Cerati, Soda Stereo)

El estribillo de la canción “Zona de promesas”, de Soda Stereo, permite graficar lo que ocurre en la vida de la tenista Carla Lucero (26/10/90). La riocuartense es una de las gratas noticias del 2019 al transformarse en una de las cuatro jugadoras que integrará la Selección Argentina que competirá en el Grupo I de la Zona Americana de la Fed Cup.

El certamen se desarrollará del 6 al 10 de febrero en el Club Campestre de Rionegro, en cercanías de la localidad de Medellín, Colombia, y Lucero defenderá los colores nacionales junto a Victoria Bosio (314° en el ranking de la WTA y 200° en el ranking ITF), Catalina Pella (379° en WTA y 24° en ITF) y Jazmín Ortenzi (200° en ITF), bajo las órdenes de la flamante capitana Mercedes Paz.

Lucero, 183° en el nuevo ranking de la ITF, conformará el combinado nacional por vez primera y se trasforma así en el segundo deportista riocuartense en alcanzar tal mérito, recordando al gran desempeño de Agustín Calleri, actual presidente de la Asociación Argentina de Tenis.

“Es súper motivante comenzar el año de esta manera. Voy a defender los colores del país y es la primera vez me toca”, cuenta –más que alegre- del otro lado del teléfono. Y no es para menos, la jugadora que se entrena en Villa del Dique tuve que sortear varias circunstancias para llegar hasta acá.  

Lucero reconoce que “se sorprendió” con la convocatoria, pero destaca que tuvo un cierre de 2018 importante. “Me puse muy feliz cuando recibí la noticia. Un poco me sorprendió, más allá que terminé un buen año tenístico, porque es la primera convocatoria. Estoy muy contenta de esta hermosa oportunidad que me da la capitana y me gustaría poder aprovecharla”, indica, y sobre su último año, analiza: “Estuvo bastante cortado por lesiones, estuve casi tres meses con el tema de la cadera, con infiltración y rehabilitación, pero terminé con muy buenos resultados durante la segunda mitad del año. Terminé sintiéndome bien tenísticamente y bien positiva de la cabeza”.

Vale recordar que, más allá de los sucesos deportivos, la tenista riocuartense fue noticia en febrero de 2012 por un trágico episodio. Se trasladaba en un colectivo desde Villa General Belgrano a Río Cuarto que resultó embestido por un camión a la altura de la localidad de Elena. En el siniestro fallecieron dos personas y otras ocho resultaron heridas. Ella sufrió luxación de la cadera izquierda y fractura de la pierna derecha, y estuvo tres meses sin caminar.

Volvió al circuito a fines de ese mismo año y desde entonces lleva adelante, con pasión y dedicación, la profesión que tanto ama. “El tema del accidente me trajo bastantes lesiones. Esto es un premio al esfuerzo y al trabajo que hago siempre”, dice, sincera y con la voz algo entrecortada.

Jugar la Fed Cup es todo un logro y ser la segunda riocuartense en la historia en alcanzar ese mérito no es un dato menor. Mucho menos para ella, quien se reconoce gran admiradora de Calleri. “Siempre tuve una gran admiración por Agustín. Es súper admirable lo que fue como tenista, siempre fue uno de mis ídolos. Creo que hay un poco de diferencia con lo que él ha logrado a lo que yo estoy consiguiendo ahora”, reconoce y afirma: “A mí me pone muy feliz esta convocatoria, personalmente y emocionalmente, y estoy con muchas ganas de ir y jugar”.

La competencia propiamente dicha

El certamen comenzará el 6 de febrero y se jugará en dos grupos de cuatro formaciones. Argentina estará en la Zona B con Brasil, Chile y Puerto Rico, mientras que la Zona A tendrá como protagonistas a México, Ecuador, Paraguay y el elenco anfitrión, Colombia.

Los seleccionados se enfrentarán todos contra todos, con series al mejor de tres partidos (dos de individuales y un dobles). Los dos primeros de cada zona jugarán el sábado 9 una final de la que saldrá el único clasificado para el playoff de abril, contra un representativo del Grupo Mundial II. Los segundos de cada zona definirán el tercer y cuarto puesto, y asegurarán su permanencia en la Zona Americana para el año siguiente. Los dos descensos a la Zona Americana II 2020 saldrán de los perdedores de los enfrentamientos entre los terceros y cuartos de cada zona.

“La Zona Americana es bastante competitiva y dura. Las dos zonas son duras en sí, la nuestra dicen que es un poco más complicada que la otra pero igualmente todos los países tienen una o dos jugadoras duras”, recalca Lucero y añade: “Hay que jugar partido a partido, cada serie es diferente, hay que tener en cuenta las condiciones climáticas (la altura de Medellín) y también la superficie ya que no todas generalmente juegan en polvo ladrillo”.

“Creo que las chances son las mismas para todas. Por supuesto sabemos que Brasil es duro y Chile también, pero tenemos que ir partido a partido y ver cómo nos vamos sintiendo nosotras y también las rivales”, sigue.

La actualidad del tenis femenino argentino y sus objetivos

En otro tramo de la charla, Lucero traza un balance del momento que experimenta el tenis argentino en la rama femenina y, si bien señala la necesidad de tener una jugadora Top 100 (Paula Ormaechea, ubicada en el puesto 235°, es la mejor rankeada), advierte un potencial crecimiento.

“Los últimos años no hemos tenido ninguna jugadora dentro del Top 100 y siempre es importante tener una referente para las que vienen abajo. Pero Ormaechea y (Nadia) Podoroska ahora jugaron qualy en el Australian Open, están jugando bien y que ellas hayan alcanzado de nuevo los Grand Slams les permite a las más chicas ver que se puede alcanzar eso, que no es tan lejano”, analiza.

“Cuando no hay nadie cerca, tal vez los objetivos y los proyectos de cada una es como que se ven lejanos. Y vienen chicas juniors que juegan bastante bien como Jazmín Ortenzi, que va ahora a la Fed Cup. Y Catalina Pella y Victoria Bosio también han cerrado un gran año. A nivel general el tenis femenino ha cerrado un buen año, ha avanzado bastante y puede avanzar mucho más”, remarca.

Finalmente, al ser consultada por sus objetivos para el 2019, explica que el gran anhelo es volver a tener ranking WTA (su mejor ubicación fue 371° en el año 2010). “No hemos planteado aún objetivos generales por el nuevo sistema que han planteado ITF y WTA, que ha dividido dos rankings. Pero el objetivo principal sería poder recuperar ranking WTA. Pero con el ranking ITF que tengo (183°) no sé bien todavía a qué torneos me va a permitir acceder. Estamos todas las jugadoras medias perdidas con esta situación, no sabemos bien a qué torneos apuntar con respecto a este nuevo ranking”, concluye.

Por lo pronto, a Lucero se le acerca un momento inmejorable en su carrera y en su vida. Lo que buena parte de los deportistas anhelan desde el primer día en que deciden apostarse como profesionales: ser de selección y calzarse la “celeste y blanca”. A Carla le llega después de batallarla y mucho. Tardó en llegar, pero llegó. Y claro que tiene recompensa. Nada más ni nada menos que una convocatoria para competir en la Fed Cup.

Redacción Al Toque