Hace una semana Mateo Gutiérrez, delantero formado en Renato Cesarini, se incorporó al plantel de la Quinta División de Boca Juniors.
Nada es casualidad en Renato Cesarini, desde el largo camino de la formación hasta la gran meta de la proyección, manteniendo vigente la esencia fundacional del club. El legado de Blas Antonio Mariscotti encuentra seriedad y profesionalismo para profundizar el Proyecto Formativo iniciado en 2016 y que homenajea al creador de la entidad.
Hace una semana Mateo Gutiérrez se incorporó al plantel de la Quinta División de Boca Juniors representando un nuevo fruto del semillero “naranja”. En la oportunidad, el atacante categoría 2001 fue acompañado por Federico Guevara –Coordinador de Juveniles- y Julio Parejo –responsable del Área Captación- para rubricar el vínculo entre Renato Cesarini y el “xeneize”.
El portentoso delantero registra roce de reserva (subcampeón 2018) y primera división en la Liga Regional de Río Cuarto (quedará en el registro el doblete ante Municipal de Reducción, el 5 de diciembre de 2017) y luego de cuatro pruebas logró la aprobación del club de la Ribera. El talento en conjunción con el esfuerzo le permitió a Gutiérrez cumplir un sueño que sirve de ejemplo individual y sienta un nuevo precedente institucional para la entidad de barrio Obrero. Un hecho signado por la causalidad de un proceso que el propio tiempo se encarga de colocar en su lugar.
Fuente: Prensa Club Renato Cesarini
Redacción Al Toque