Un domingo pasado por lluvia en la ciudad de Río Cuarto. Un domingo que tuvo en el “Antonio Candini” todo el color y el calor. Un domingo “celeste” e histórico.
El cronograma de la jornada decía que a las 14 horas se abrían las puertas del estadio. Desde la mañana, el clima parecía estar empecinado en arruinar la fiesta del fútbol. Pero a la gente no le importó. Nunca importa cuando se trata de pasiones y amores tan grandes. Y de eso el fútbol sabe de sobra.
La hinchada de Estudiantes salió a las calles bajo la lluvia, que por momentos era más intensa, y empezó a copar el estadio desde temprano. Remeras y gorritos celestes por toda la Avenida España. Banderas y más banderas. Algunas que encierran en sus frases historias emotivas.
Y obviamente, como en toda fiesta, tantas almas que empiezan a unir su canto. Y la cancha vibra, la cancha late a la par de esos corazones que gritan. “La hinchada está loca quiere el Nacional B”; “dale, dale, dale, dale león”; “vos sos la alegría de mi corazón”.
La tarde gris se pintó de “celeste”, los jugadores adentro de la cancha le dieron alegría a los corazones que miraban y alentaban desde afuera, y la hinchada loca tiene lo que quería: Estudiantes ganó y ascendió. Estudiantes dio el salto y juagará en la B Nacional.
Fotos: Al Toque
Redacción Al Toque