Cristian Costamagna protagoniza una historia de amor, penas y alegrías. El volante de Independiente Dolores prometió y cumplió. En el juego de reserva ante Fusión FC, el “negro” retornó tras varios años fuera de los campos de juego por la promesa que le realizó a Fernando “corcho” Costamagna que falleció en 2016. Su vida, la relación con su hermano y los sueños son parte de la entrevista de Al Toque Deportes.

En algún momento de la charla y siempre agradecido, Cristian Costamagna remarca la importancia de Mariano Dulla y su cuerpo técnico para su retorno a las canchas. Dulla dejó su mensaje: “Volvió por el 'corchito' que era muy importante para los chicos que hoy juegan en primera división. Él es importante para el grupo. El 'negro' fue un pilar del ascenso de 2011, la gente lo quiere mucho”. Las palabras deL DT van de la mano con la calidez demostrada por el entrevistado, su respeto y paciencia para hablar de cuestiones delicadas.

Hijo de Gustavo Costamagna y Daniela Garelli. Hermano de José, Fernando y Jésica. Sobrino de Fabián y Marcelo Garelli su destino no podía ser otro que el fútbol. “Nosotros vivíamos en el campo y me incliné para ir a Lautaro Roncedo por ver a mis tíos jugar ahí”, dice sobre sus primeros pasos en la cancha chica del “doctor” y marca su llegada a General Cabrera: “Las divisiones juveniles las realicé en Independiente Dolores. Tuve la suerte de debutar joven y estar en el ascenso de 2011, ante Acción Juvenil”.

Fernando seguía los pasos de su hermano, pero no solo en la faz deportiva, en la vida misma. “La relación con él era muy fuerte. Además de hermanos, éramos amigos, compañeros. En 2012 compartimos cancha, cuando todavía estaba en la ciudad”. No solo la “furia roja” era motivo de pasión. Boca Juniors fue testigo del fanatismo de los Costamagna: “Fuimos a la Bombonera, a Córdoba. Sin dudas que vivimos muchas cosas juntos”.

La vida los puso a jugar un partido complejo, imposible de imaginar para la familia. “Fue un momento muy duro. No pensamos vivir esto a tan corta edad. Estaba entrenando en Instituto y se lesiona (rotura de ligamentos). Se opera y tenía que sumarse a la pretemporada, pero en un chequeo le diagnosticaron la enfermedad”.

- ¿Cuándo y cómo se produce la promesa?

- En 2014, después de varias lesiones no quería saber más nada con el fútbol. Dos años después, antes de una operación, que finalmente no se pudo realizar, estaba cuidándolo en Córdoba, los dos solos en una habitación. Fue ahí donde me insistió para que le prometa que iba a volver a jugar. No dormimos esa noche, miramos fútbol, que era su vida.

- ¿Cómo transcurrieron estos años sin su hermano y alejado del fútbol?

 - Fueron muy duros. Después de la pérdida de mi hermano, falleció mi abuelo. Estaba enojado con la vida, sentía que me estaba sacando todo lo que quería. Después de un tiempo, mi cabeza cambió. Me di cuenta que tenía una promesa por cumplir y empezó la planificación con muchos viajes, médicos y todo eso.

- Se acercaba el momento de ponerse la camiseta nuevamente, ¿Cómo vivió estos días?

- No pude hacer la pretemporada, me operé en noviembre y estuve 4 meses para recuperarme. Siempre me basé en el trabajo del cuerpo técnico de Mariano Dulla, ellos son parte importante para que pueda volver al fútbol.

- ¿Cuáles fueron las sensaciones que vivió el domingo?

 - Fue una experiencia muy linda. Desde que vi la lista de concentrados se me vinieron muchos recuerdos a la cabeza, mi abuelo, mi hermano y las lesiones. La gente me reconoció, pero lo hace con todos. Ellos saben que trabajamos y a la noche entrenamos. Debo agradecerles a todos los jugadores del club, siempre estuvieron presentes alentándome cuando no daba para más.

“Queríamos jugar juntos en Lautaro Roncedo y retirarnos en Independiente Dolores”, dice de manera contundente Cristian Costamagna al referirse a los sueños, otro motivo de unión con Fernando. “En Independiente Dolores pasamos muchas alegrías juntos. Mi sueño personal era verlo jugar por televisión, primero en Instituto y luego en otros clubes”, finaliza el mediocampista.

Redacción Al Toque