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Por comenzar
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El entrenador de básquet de Acción Juvenil relató su experiencia tras regresar de viaje de Estados Unidos. El seleccionador del combinado de la ciudad se refirió a la subestimación de la pandemia en el país del norte. “Nadie hablaba del tema y en pocos días se transformó en un caos”, indicó.
La cuarentena obligatoria atraviesa su primera semana en Argentina. A estas alturas, las fronteras fueron cerradas en su totalidad, con algunas excepciones desde países limítrofes. El canciller Felipe Solá aseguró hace algunos días que “la gente que se quede afuera será la mínima posible”.
En este contexto, Emanuel Garello y su pareja transitaron sus últimos días de vacaciones en Estados Unidos. El entrenador de básquet de Acción Juvenil y seleccionador del combinado local regresó el sábado pasado al país y desde ese momento cumple con la cuarentena obligatoria.
“Por suerte el viaje fue normal para nosotros, aunque tuvimos mucha incertidumbre. Pasamos diez días sin poder comunicarnos con la aerolínea LATAM, con la que teníamos los pasajes de vuelta”, relató Garello. Él y su esposa reclamaron a la empresa por redes sociales, e inclusive su familia desde Argentina tampoco pudo establecer contacto. Finalmente, arribaron al aeropuerto en Miami 48 horas antes para hacer el check-in y el vuelo se desarrolló sin inconvenientes.
- ¿Cómo fue la llegada al país? ¿Qué procedimientos llevaron a cabo?
- Al llegar encontramos una situación extraña porque esperábamos muchos controles y no fue así. Hicimos migraciones y pasamos un mini puesto de sanidad, donde estaba una chica con un delantal del Ministerio de Salud. Nos puso un poco de alcohol en gel en las manos y nada más. Ni siquiera nos tomaron la temperatura. Arriba del avión completamos un formulario en forma de declaración jurada en el que nos preguntaban si teníamos síntomas o nos habíamos sentido mal. Lo que escuchábamos e informábamos de lo que pasaba acá, no sucedió. Simplemente llegamos al país y no tuvimos ningún tipo de control.
- ¿Cómo se sienten desde su llegada?
- Estamos bien. Pasaron varios días y no tenemos ningún síntoma. Nos tomamos la temperatura todos los días por precaución. Estamos encerrados, cumpliendo con la cuarentena con responsabilidad porque entendemos que hay que respetar lo que se ha impuesto.
El otro virus: la subestimación
Garello comenzó su viaje el día 2 de marzo. En ese momento, la información se circunscribía solamente a la situación del coronavirus en China y los primeros casos en algunos países de Europa, como Italia y España. El entrenador cuenta que en el Aeropuerto de Córdoba y en el de Santiago de Chile, donde hicieron escala, observó a muy pocas personas con barbijo. Al llegar a Estados Unidos, nadie hablaba del tema.
- ¿Qué notaba de la gente en Estados Unidos con respecto al coronavirus?
- Mantenían una vida normal. Con mi esposa estuvimos en Miami apenas llegamos y el país estaba como si nada pasara. Creían que era algo de China y Europa que no iba a llegar, era un tema totalmente secundario y no tomaban ninguna medida preventiva. El día 8 tomamos un crucero por el Caribe y ahí perdimos un poco de información porque teníamos acceso limitado a Internet. Cuando volvimos a Miami y bajamos del barco, todo era un caos. El primer gran cimbronazo en el país fue la suspensión de la NBA, a partir de ahí todos los canales de televisión hablaban las 24 horas del tema.
- ¿Cómo continuó su estadía después de eso?
- Teníamos programado ir a Orlando, que está cercano a Miami, para visitar los parques. Tuvimos la desgracia de no poder disfrutarlos porque ya estaban cerrados. Estuvimos los últimos cinco días ahí y los centro comerciales y negocios fueron cerrando progresivamente. El último día no había gente en las calles ni locales abiertos.
- ¿Peligró su regreso en algún momento?
- Siempre nos mantuvimos en contacto con nuestra familia en Argentina, intercambiando información. Nos preocupamos cuando se empezó a hablar del cierre de aeropuertos y la cancelación de vuelos. No teníamos previsto ningún percance, si nos quedábamos varados allá se iba a complicar la estadía. Podíamos aguantar dos o tres días más, pero no más que eso. En la escala de Santiago había una fila muy grande de pasajeros varados que estaban esperando que se bajara alguien para volver al país. Por suerte no vivimos eso y llegamos en tiempo y forma.
Incertidumbre deportiva
Ante el avance de la pandemia, todo el deporte nacional se paralizó. Antes de emprender su viaje, Garello coordinó junto a Lucas Chiesa los entrenamientos del plantel de Acción Juvenil durante la pretemporada.
- ¿Pudo hablar con sus jugadores sobre esta situación?
- Todavía no pude contactarme con todos, pero sí con algunos de los referentes para saber cómo están. Lucas me comentó las novedades y fue él quien se encargó de entregarles la actividad a los jugadores para que realicen durante este tiempo. La semana que viene me reincorporo al trabajo, pero estamos a la expectativa de lo que suceda con una posible extensión de la cuarentena.
- Con respecto a la selección de Río Cuarto, ¿cómo ve el futuro teniendo en cuenta el clasificatorio que se tiene que disputar en abril?
- No tenemos confirmación de la suspensión del torneo. La Federación Cordobesa debe estar esperando novedades sobre la ampliación de la medida para saber qué actividades podremos realizar. En relación al equipo, mi asistente Martín El Kadre tuvo un entrenamiento por semana de las cuatro que estuve ausente. Creo que el torneo no puede jugarse en la fecha prevista porque el equipo no va a estar entrenado ni en buena forma, como todos. Mi opinión es que se va a postergar. Nadie quiere tomar decisiones apresuradas, así que esperaremos la confirmación de las fechas para poder llegar de la mejor manera posible.
Fotos: Al Toque/Archivo
Redacción Al Toque