El semblante que se percibía tras la caída ante Maipú en el vestuario de Estudiantes era de bronca. Pues, el plantel y el cuerpo técnico son conscientes que el “celeste” no fue menos que su rival como para perder el partido…pero lo perdió. Y allí radica la bronca. Porque los tres puntos se escaparon por la propia impericia a la hora de marcar en las pelotas detenidas.
“Trabajamos en la tenencia del balón y mejoramos en el segundo tiempo. Sabíamos que debíamos trabajar en las pelotas paradas y no lo pudimos resolver y lo pagamos caro”, dijo Maximiliano Gómez, quien jugó ocho y de doble cinco en ciertos pasajes del juego.
Por su parte, Sebastián Pérez dijo que “esperaba eso de Maipú. Sabíamos que ellos en la pelota parada trabajaban bien, pero se nos complicó contenerlos y nos hicieron dos goles así”.
A todo ello, Luis Di Santo dijo que se fue triste del estadio “Omar Sperdutti” porque “al delantero se le pide hacer goles y cada vez que no hago un gol y encima perdemos me voy triste”. Destacó que tuvo más participación en juego, pero insistió en la desazón por la derrota ante Maipú.
Por último, a la salida del micro de la delegación “celeste” rumbo a Río Cuarto, Rodrigo Arneodo dijo que fue “un mal debut” porque “Estudiantes hizo un buen partido, pero no ganamos”.
Redacción Al Toque