“No sabemos nada de cuánto tiempo más va a durar”, indicó Oscar Boglione haciendo referencia al parate del automovilismo por la pandemia del Coronavirus.

Quien hace las veces de comerciante de Laguna Larga, es quien maneja maneja los destinos de las Categorías Asociadas de Pista Cordobesa (Capicor).

En cuanto a la temporada, Boglione describió: “Teníamos mucho entusiasmo, había varios pilotos nuevos y estaba lindo para comenzar (la primera fecha estaba programada para el 29 de marzo) pero hoy por hoy no sabemos cuándo se va a habilitar”.

La primera fecha estaba estipulada para el 29 de marzo, aunque la emergencia sanitaria y posterior aislamiento social la privó de su desarrollo normal.

Está claro que, al igual que todas las categorías del automovilismo nacional y mundial, el Capicor deberá reprogramar el torneo antes de comenzar la temporada.

“Cuando esto pase nos sentaremos con la federación a evaluar las cosas y veremos las fechas nuevamente”, indicó el dirigente.

Y agregó: “Tenemos que ver cómo rearmamos el campeonato, cuántas fechas vamos a hacer o programar fechas dobles. Nosotros teníamos previstas 8 carreras y tal vez podamos hacer 6”.

Boglione es optimista en cuanto a la reanudación de la competencia, aunque ve imposible el desarrollo normal de la misma para antes de julio.

 “Yo no pierdo la esperanza de que la epidemia pueda pasar pronto, el entusiasmo estaba, los pilotos seguramente van a seguir estando, aunque algunos se van a caer. Esperemos que la podamos sacar adelante. Yo creo que sí”, cerró el dirigente.

Entre esos pilotos nuevos, que esperaban con ansias el debut el pasado 29 de marzo se encuentra Juan Pablo Bruno, el ex piloto de BMX y actual entrenador de Lucas Pomilio en la disciplina, con amplios pergaminos en el plano internacional.

Bruno correrá en la Clase A con un Fiat 600 que había comenzado a armar hace 5 años.

“Ahora que lo terminé pasa esto, estoy como un chico al que le regalás una chupaleta y le decís que no la puede abrir”, describió el debutante.

“El chasis lo preparó Nico Ragazzini y el motor Mario Brunato en Los Cóndores, hicimos una prueba a comienzos de marzo y después quedó en el taller. Ni bien se pueda lo traigo para hacerle los últimos detalles  y está listo para salir a la pista”, contó Bruno.

Juan Pablo Bruno es sólo un caso de todos los pilotos de la provincia que están esperando que los motores del Capicor vuelvan a rugir para sentir el olor a aceite y nafta con la adrenalina de un circuito.

Redacción Al Toque