En cuarentena se visibilizaron aún más las series deportivas. A falta de fútbol, de básquet, de emociones, de partidos, de goles y así muchos etcéteras, los apasionados hemos encontrado un buen “consuelo” en mirar series de ficción o documentales relacionados al deporte.

El pasado 5 de junio hizo su estreno mundial El presidente, la serie de la televisión chilena que narra uno de los casos involucrados en el “FIFA Gate”. La serie fue producida por Fábula, Gaumont y Kapow para Amazon Prime Video y cuenta sobre la investigación para capturar a Sergio Jadue y a otros miembros asociados a la FIFA, la entidad madre del fútbol mundial. Uno de los personajes es nada más ni nada menos que Julio Grondona, histórico presidente de la AFA – Asociación del Fútbol Argentino.

El presidente no lleva ni una semana y ya despertó muchas polémicas, por ejemplo el enojo de la familia Grondona.

Humberto Grondona, hijo del ex presidente de la AFA, se mostró muy crítico con la serie y expresó que le enviarán carta documento a las tres productoras y a la plataforma Amazon. Acusó que están “lucrando con la imagen de mi padre”. Sus hermanos, Nélida y Julio Ricardo también se manifestaron en una carta pública: "Manifestamos nuestro dolor y repudio con la utilización del nombre, caracterización y datos de la vida privada de nuestro padre, así como la falsa imputación de actos que afectan su dignidad, buen nombre y honor".

Sergio Jadue, protagonizado por Andrés Parra -conocido por personificar a Pablo Escobar en Escobar, el patrón del mal- es el personaje principal y, a través de su historia, se cuenta sobre casos de corrupción en la FIFA. Jadue era el presidente de un pequeño club de Chile y de repente se convirtió en una pieza clave para Grondona.

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El otro juego

Además de algunas polémicas, se abren también algunos debates en torno a las dirigencias del fútbol. En cuarentena la pelota se frenó, pero siguieron rodando los intereses y se juegan en los escritorios. No sólo en la ficción.

En cuarentena, tal vez, se intensifique más ese fútbol que se juega en los escritorios. Y no nos hace falta irnos a la FIFA y sus escándalos para verlo.

Basta ver el desparpajo dirigencial de la Primera Nacional, donde milita Estudiantes de Río Cuarto, y la lucha de intereses que van más allá de lo deportivo alrededor de los ascensos. La segunda división de nuestro país está en un constante tira y afloje desde el parate por la pandemia.

“Ascensos directos sí, ascensos directos no. Que reducido, que suspensión total o reanudación normal. Firmas en apoyo a AFA y un rebelde con causa provocaron que la Primera Nacional refleje, una vez más, la desidia de nuestro fútbol argentino.” – Ver nota Un desparpajo dirigencial

Otro ejemplo nos lo da el nuevo capítulo en la vida institucional de la Liga Regional de Río Cuarto. A fines del mes de mayo se reavivó un viejo asunto cuando integrantes del Comité Ejecutivo saliente -bajo la presidencia de Norberto Ferrero- dieron a conocer documentación avalada por Inspección de Personas Jurídicas que pone en vigencia el nuevo estatuto aprobado por los clubes. “Lo que buscamos nosotros es que los clubes sepan que habíamos hecho las cosas bien”, expresó en su momento Carlos Cofré –ex secretario de la LRFRC-.

“La pelota no rueda en los campos de Río Cuarto y región mientras se aguarda al conclave de agosto para delinear el futuro del calendario futbolístico 2020. Esa espera se vio interrumpida por un nuevo capítulo en la vida institucional del ente rector que expone asuntos que parecían resueltos y olvidados.” – Ver nota Nuevo capítulo en la vida institucional de la Liga Regional

Imagen: Amazon

Redacción Al Toque