En el día de ayer, el Comité de Crisis de la ADC (Asociación de clubes de básquet) y CABB decidió la finalización de la competencia de la Liga Nacional de Básquet en su temporada 2019/2020.

La decisión fue tomada con el objetivo de resguardar la salud pública y evitar la circulación entre las provincias. No habrá campeón ni descensos en la competencia.

En relación a este anuncio, César Brasca, el presidente de la Asociación Riocuartense de Básquet, dio su visión: “Era sabido que iba a ocurrir esto debido a que la mayoría de los planteles que juegan la Liga tienen extranjeros que están en su país de origen”.

“En la ciudad estábamos listos para empezar, pero después de todo esto se va a tratar al momento que nos habiliten jugar algún torneo para no perder el año”, comentó el máximo dirigente del básquet a nivel local. Provincias como La Pampa, Misiones y algunas localidades de Santa Fe ya comenzaron los entrenamientos.

Brasca expresó que desde la Asociación Riocuartense, las esperanzas se mantienen: “Hemos tenido reuniones desde la Federación con presidentes de las otras Asociaciones. Los jugadores quieren volver a la cancha, están agotados de entrenar virtualmente, aunque sea en la modalidad uno contra uno”.

Protocolo para la provincia

Desde la Federación Cordobesa de Básquet elevaron un protocolo hace 15 días con el fin de regresar a los entrenamientos. El COE Central de la provincia aún se encuentra con la evaluación de la situación.

Su vicepresidente, Walter Garello, habló sobre el trabajo realizado durante este tiempo: “Tratamos de inmiscuirnos y ponernos al tanto sobre la situación de cada club, no solamente por la pandemia sino por lo económico y lo anímico”. El dirigente agregó que la preocupación giró en torno al pago de sueldos de los profesores. Garello reconoció su trabajo: “Las entidades empezaron con mucha fuerza desde lo virtual, pero reconozcamos que se suma en una familia a lo que tienen que hacer en el colegio, es muy difícil mantener esa motivación. Hoy los niños tienen primero la actividad escolar, por eso hay que reconocer el trabajo de los profesores”.

De las situaciones presentadas por este tiempo de parate, el contrato de los jugadores es otra faceta que la Federación tuvo bajo análisis: “Lo que más nos preocupa es que los clubes sufran la deserción de jugadores. Tenemos problemas edilicios, económicos también. Queremos que los jugadores mantengan el contacto con sus clubes”, afirmó el vicepresidente.

En la provincia, se estaba por comenzar con torneos oficiales de categorías formativas antes del cese de actividades. Garello expresó con relación al futuro: “El Consejo Directivo de la Federación resolvió que los torneos de todas las categorías de Selecciones, a medida que lleguen las fechas y no puedan realizarse, se cancelen”. En cuanto a los clubes, no se tomó una decisión: “En cuanto tengamos fechas oficiales, deberemos evaluar qué clubes están en condiciones de afrontar la competencia en cuanto a lo económico y a su motivación”, manifestó Garello.

En relación al regreso a la competencia, Garello aseguró que “está complicado”. El también vocal de la Confederación Argentina de Básquet dijo sobre la resolución de la Liga Nacional: “Teníamos la idea de jugar un cuadrangular en una zona blanca y terminarlo en un solo lugar, pero el traslado, costos y el distanciamiento hicieron que el gobierno nacional no nos diera la autorización”. Por primera vez, la Liga Nacional no tendrá un campeón.

El dirigente dio su opinión con respecto a la suspensión de la Liga Nacional: “Creo que fue una buena decisión. Había opiniones dispares, algunos equipos que estaban armados y esperando para jugar, otros quizás que se sacaban un peso de encima. Mirándolo como un todo, me parece una medida acertada. Estamos hablando de profesionalismo. Tuvieron la suerte de que las Asociaciones más grandes se sentaron a hablar de cada uno de los casos. Hay jugadores que viven de esto. Hay clubes que dicen que si no tienen actividad, no tienen público ni ingresos. Se hizo todo lo posible para trata de regresar”, afirmó Garello.

Mientras, en el norte…

En Estados Unidos, la NBA decidió mudarse a los complejos de los parques de Disney en Orlando, Florida, para disputar el final de su fase regular y los playoffs de la temporada 2019-2020.

El país del norte es el más afectado por la pandemia, pero el mundo de la pelota naranja no quiere detener su marcha. Entre la NBA y Disney cerraron un acuerdo para convertir los parques en una burbuja a prueba de coronavirus.

Esto despertó críticas de parte de varias franquicias y jugadores. La disputa entre lo deportivo y lo sanitario llevó a considerar a los directivos de NBA a aquellos jugadores que no quieran participar como “protegidos” o “excluidos”. Kyrie Irving, hombre de los Brooklyn Nets, fue uno de los estandartes del posible boicot a la organización.

Los jugadores tendrán hasta el 24 de junio para comunicarle su decisión a las autoridades, que ya presentaron a los equipos las normas y reglamento de su estancia en Orlando. Se planea que el último día de Finales NBA sea el 13 de octubre, para no interferir con el inicio de la siguiente temporada.

Foto Puntal Villa María
Redacción Al Toque