El tiempo de pandemia afectó al calendario típico de todos los deportes. En el mundo tenístico, los torneos de todas las categorías fueron suspendidos. Hace pocas semanas, las novedades se reactivaron con el anuncio de un calendario de torneos ATP para los grandes jugadores.

A partir del 14 de agosto, el tour contará con los ATP de Washington y Kitzbühel; los Masters 1000 de Cincinnati, Madrid y Roma y dos Grand Slams: el US Open y Roland Garros. Torneos solo en cemento y polvo de ladrillo, con la aclaración de que el Masters de Cincinnati se disputará en el complejo del US Open en Flushing Meadows.

En una fecha similar, los circuitos más chicos comenzarán con sus respectivas acciones. Diferentes torneos Challengers y Futures se anunciaron en las zonas del mundo menos afectadas por la pandemia en la actualidad.

En este marco, el tenista riocuartense Franco Agamenone, quien se encontraba entrenando en su departamento en Buenos Aires, voló a Italia para instalarse en Lecce y unirse al Circolo Tennis Mario Stasi. En ese club competirá en los torneos interclubes europeos, en la segunda división.

- ¿Por qué decidió irse de Argentina?

- Me vine a Italia porque allá no se puede hacer nada, ni jugar ni entrenar. Llegué el sábado pasado, en un vuelo de repatriación porque tengo la ciudadanía italiana. Tengo un contrato laboral para disputar los interclubes. Cuando me llamaron sentí un gran alivio, estaba muy contento. Me puse a averiguar todo con los consulados de ambos países y por suerte conseguí viajar.

- ¿Ese llamado fue una gran motivación por como venía este año?

- Sí, yo venía entrenando en el departamento en Buenos Aires pero mucho no podía hacer. Ni bien me llamaron me dio mucha alegría, una motivación tremenda. Me dieron ganas de entrenar el doble, y ahora estoy acá en una casa entrenando físico doble turno. El equipo juega un partido por semana todos los domingos, se juegan cuatro singles y dos dobles. Hay diferentes grupos de cuatro. El que clasifica primero pasa a los playoffs, el segundo y tercero mantienen la categoría, y el cuarto juega el playout para ver si se mantiene o desciende. Acá un club te contrata y nos ayuda mucho que nos paguen por partido jugado o depende del arreglo que cada uno tenga. Económicamente es de gran ayuda, sin esto no podría jugar y sé que un montón de los que están entre el 400 y 500 al 1.000 del ranking no podrían seguir jugando.

- ¿Otros colegas siguieron sus pasos?

- Muchos vieron que hice una publicación en Instagram y preguntaron cómo hice para irme. Muchos están analizando cómo hacer para venirse, pero los que no tienen pasaporte europeo se les complica. Sería muy bueno porque allá no podemos hacer absolutamente nada y acá al menos se puede entrenar y, si además podes competir, buenísimo.

Horizonte difuso

El tenis se puso en el centro de las miradas a nivel mundial cuando hace una semana, Novak Djokovic daba positivo por coronavirus después de la organización del escandaloso Adria Tour. En aquel torneo, disputado en distintas zonas de los Balcanes y con público en las gradas, se produjeron contagios del virus pandémico en tenistas y entrenadores.

La irresponsable maniobra por parte de los organizadores del torneo, en donde contrajeron el virus otros jugadores como Grigor Dimitrov, Viktor Troicki y Borna Coric, puso en jaque el regreso del circuito tenístico.

Los más afectados dentro del tour no son los jugadores que se encuentran en lo alto del ranking, sino tenistas que se posicionan entre los puestos 400 y 1.000. Éstos ya tienen una carrera dedicada y exclusiva, pero los costos económicos del deporte y el parate hicieron estragos. Situaciones como las del Adria Tour ponen en riesgo no solo el regreso del tenis, sino también la carrera de algunos tenistas.

Agamenone, actualmente en el puesto 416 del ranking ATP, expresó con respecto al caso en el que estuvo involucrado Djokovic, el n° 1 del mundo: “Hablé con otros chicos argentinos con los que jugamos Futures y coincidimos en que fue un acto de irresponsabilidad y un error. Ojalá que no vuelva a repetirse y que se tenga más cuidado”.

- ¿Cuál es el camino a seguir para los torneos Futures?

- Se publicó un calendario. La ITF y la ATP quieren jugar a toda costa. El circuito comenzaría el 17 de agosto con torneos Futures. Supuestamente arranca y ellos quieren que se juegue a toda costa. En mi opinión, es un poco injusto para los jugadores sudamericanos que todavía están atravesando la pandemia, ni hablar en Argentina cuando todavía no se puede mover nadie. Siempre al tenis se le dio mucha más importancia acá en Europa, y Sudamérica pasa a ser un poco secundario. Lo que se sabe es que quieren arrancar. Por ahora, se jugaría en su mayoría en Europa este calendario. También habrá torneos en Túnez y Turquía. No entiendo cómo quieren jugar el US Open en Estados Unidos, por ejemplo, cuando la situación de pandemia allí está muy mal.

- ¿Cuáles son sus expectativas personales para lo que queda del año?

- Estoy con muchas ganas de empezar a jugar y entrenar. Estos partidos de interclubes me van a servir mucho para ir agarrando ritmo. Si llega a arrancar el circuito, la idea es meterme de lleno en los Futures y hacer el mejor papel posible ahí. Yo arranqué el año con el objetivo de meterme entre los mejores 600 o 500 del ranking. Tuve un buen arranque y ahora es todo un poco incierto porque no sabemos cuántos torneos va a haber. Al ser menos torneos, va a ser un nivel más duro, porque todos van a ir a jugar los 4 o 5 torneos que haya, cuando siempre hay alrededor de 10 por semana.

Foto: Francisco Vaschetto

Redacción Al Toque