Es cierto, en cualquier punto de la geografía argentina el fútbol ocupa un lugar preponderante y despierta sentimientos difíciles de igualar. Sin embargo, cada poblado de nuestro diversificado territorio, por minúsculo o mayúsculo que sea, tiene un contexto que lo hace único e irrepetible.
San Martín es una ciudad ubidaca en centro oeste de la Argentina a 44 km de la capital mendocina. Se trata de una de las más importantes de la provincia y se halla en el imponente corredor carretero que une a Buenos Aires con Mendoza y con Santiago de Chile.
La mañana dominguera sanmartiniana nos recibió con calor y un sol recalcitrante. Nuestro primer destino fue el Museo Municipal “Las Bovedas”, una réplica de la casa que mandara a construir el General San Martín para terminar sus días en el humilde oficio de chacarero. Vivió desde el 4 de febrero de 1823 hasta el 4 de noviembre de ese mismo año. (NdR: la casa original estuvo construida a pocos metros y fue destruida por el terremoto de 1861).
La estructura consta de tres habitaciones, con el “Salón Sanmartiniano” como principal. El mismo cuenta con un sillón original perteneciente al General y con vitrinas construidas con vidrios y marcos que se rescataron del amoblado genuino. Además cuenta con cuatro amplias galerías donde se exhiben objetos y maquinas agrícolas del siglo pasado.
Nuestro siguiente espacio en conocer fue la Plaza de la Ciudad, ubicada en el microcentro. Con un “verde” impactante y una variedad de árboles y arbustos asombrosa, en medio de ella se encuentra el monumento al libertador José de San Martín.
Esta plaza fue demarcada en 1823 por solicitud del gobernador Pedro Molina en homenaje al padre de la patria y un siglo después de la Revolución de Mayo, una comisión de damas se dirigió a las autoridades para solicitar la construcción de este monumento en memoria de San Martín. El mismo permanece en la plaza y consiste en una estatua ecuestre del General que señala hacia la cordillera.
Mendoza, tierra del sol y el buen vino, tiene un paso obligado por el recorrido por la vid. Los mejores vinos de la Argentina son el producto e industrialización de las miles de hectáreas destinadas a esta actividad. Durante nuestro periplo pudimos conocer en mayor y menor medida algunos de los viñedos y plantas de producción de firma muy destacadas como bodegas Orfila y Crotta.
Todo esto y el Club Atlético San Martín de Mendoza, nuestra estación final, hacen de la ciudad un atractivo turístico ineludible para quien tengo la fortuna de visitar la región del Cuyo argentino.
Redacción Al Toque