De visitante, el “lobo” no puede, titula el suplemento Ovación de Diario Uno

Gimnasia no perdió la costumbre en este torneo y volvió a caer en condición de visitante. Atenas de Río Cuarto lo venció por 3 a 1 por la 7ª fecha de la zona F.

No había pasado mucho en el partido en el tema ofensivo y llegó la apertura del marcador. A los 14 minutos de la etapa inicial, el Albo consiguió un gol.

Un gran pase de Beraldi para Monesterolo le permitió al delantero colocarla al poste derecho del arquero Astrada.

A partir de ahí, el local se agrandó y comenzó a acercar peligro al arco de Gimnasia.

Otra vez lo tuvo Monesterolo, pero esta vez el duelo lo ganó el guardameta del Lobo y evitó el segundo grito de gol del atacante.

Gimnasia no logró provocar situaciones de riesgo, con un Anzorena bien custodiado por los marcadores de Atenas y sólo la voluntad de Villaseca con sus corridas complicaban al fondo griego. Aunque el Banana fue lo más peligroso del Lobo en el primer tiempo.

Pescara no estuvo fino en la definición y desperdició una gran chance. Sobre el final, el volante de Atenas contó con otra, pero apareció Astrada para salvar.

En el comienzo del complemento, el Lobo salió más aguerrido. El arquero local le tapó una pelota de gol a Anzorena. Después García sacó una en la línea tras un tiro de Villaseca. El adelantamiento dejó algunos huecos en el fondo y Atenas pudo aumentar cuando Vogliotti reventó el travesaño.

En la siguiente, el delantero no perdonó y marcó el segundo. Sobre el final descontó Rebeco y en la agonía Morardo despejó todas las dudas sobre qué equipo merecía más al convertir el tercero.

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¿Cómo cambiar esta realidad?  Sin dudas es la pregunta a la que sólo Gimnasia tiene la respuesta. Ayer cayó nuevamente de visitante 3-1 ante Atenas, equipo que entró entre los tres mejores de la zona F y por el momento estaría clasificado, instancia de la cual se aleja el Lobo del parque.

Ya en el partido, Atenas salió decidido a presionar en terreno de Gimnasia, que inmediatamente ajustó las marcas. Se paró mejor en el terreno y emparejó las acciones transformando el partido en un interesante ida y vuelta, aunque sin crear demasiado fútbol en los últimos metros sobre las áreas rivales, hasta que sobre esos pobres méritos de ambos apareció Víctor Beraldi para romper las estructuras.

Sobre los 14’ asistió a Monesterolo quien ingresó solo para fusilar al arquero Astrada y abrir, no sólo el marcador, sino el partido. El Lobo sintió el golpe y se desgranó en la faz defensiva. Fue entonces cuando crecieron las figuras de Beraldi y Monesterolo quien tuvo tres oportunidades claras; dos quedaron en las manos de Astrada.

El buen juego del local que se basó en la precisión en ofensiva, se llevó las mejores situaciones ante un Gimnasia que no reaccionó, para irse al descanso con bastante preocupación.

Desde el arranque del complemento el Lobo se animó, fue más ambicioso. Sobre los 10’, un centro que tomó Villaseca, produjo que el arquero García se revolcara para sacar el balón sobre la línea.

De contra Vogliotti le reventó el travesaño a Astrada. Pero un error entre Acosta y Astrada en el fondo originó que Vogliotti, a los 23’  ya comenzará a liquidar el partido con un golazo. Rebeco descontó sobre los 42’ pero, Atenas en tiempo de descuento y por medio de Morardo selló la suerte del Lobo.

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El empate con sabor a derrota ante Guaymallén entre semana exigía a Gimnasia a por lo menos sumar en su visita a Río Cuarto. El objetivo no era para nada fácil. En frente estaba Atenas, quien de local es casi invencible. Y pese al esfuerzo, el Lobo no pudo sumar en su visita y se trajo una derrota que complica la clasificación.

El Lobo, por momentos, hizo un buen partido pero recibió dos mazazos. En el primer tiempo, cuando nada pasaba apareció el primer tanto de Atenas y en el segundo período, cuando el Lobo arrinconaba a su rival y parecía que llegaba al empate, Rodrigo Acosta cometió un error garrafal y le cedió el segundo gol al local.

Desde el primer minuto de juego, Atenas salió decidido a llevarse por delante al Lobo. Sin embargo, Gimnasia supo manejar esa presión y emparejó rápidamente el encuentro. Así pasó el primer cuarto de hora y nada pasó.

Cuando el partido transcurría en un mar de dudas y de mediocridad, una jugada aislada dejó a Atenas arriba en el marcador. Fue a los 15’ cuando una de las figuras de la cancha, Víctor Beraldi, apiló a un par de jugadores Mensanas y habilitó a Monesterolo que, ante la salida de Astrada, definió correctamente.

Fue un golpe duro para el elenco de Villalobos. El Lobo perdió la tranquilidad y comenzó a sufrir. De allí en más, todo fue del local. A los 26’ a Paez se le pasó la pelota por debajó del botín y Monesterolo quedó sólo ante Astrada. Sin embargo, el 1 ganó el duelo y tapó el remate del mediocampista.

Luego Fernando Cámara intentó con un remate de larga distancia que tapó el arquero local, pero unos minutos después, otra vez Atenas tuvo el segundo en los pies de Morardo. A los 34’ pudo llegar el empate del Blanquinegro cuando Anzorena, uno de los mejores en la visita, sacó un potente remate que de milagro alcanzó a sacar el portero.

El PT se terminaba pero antes Atenas perdería otra clara. Luego de una gran jugada, Pescara quedó frente a Astrada y el 1 tapó nuevamente. Así terminaba el primer período con un panorama más que desfavorable para Gimnasia.

Y en el ST, todo cambiaría. Desde los 3’ con otro disparo de Anzorena que sacó García, el Mensana se le fue encima a Atenas y las situaciones de gol a su favor comenzaron a aparecer. A los 8’ luego de una jugada entre Soria y Anzorena, Villaseca recibió un centro al corazón del área y cuando todos en el banco visitante gritaban el gol, el portero García sacó una pelota increíble.

Atenas respondía con una contra tremenda que terminaría con un disparo de Voglioti al travesaño. Pero Gimnasia seguiría siendo mejor y a los 15’ tendría otra muy clara. Nuevamente, Horacio Anzorena sacó un buen remate que milagrosamente sacó García al córner. El Lobo merecía el empate, pero llegaría el mazazo de la tarde.

Fue a los 23’ cuando luego de una gran jugada de Pescara, Monesterolo sacó un gran remate que tapó Astrada dejando rebote. Allí apareció Acosta que, lejos de despejarla como cualquier otro defensor en esa situación, se complicó solo y Vugliotti se la quitó para marcar el 2 a 0.

Fue un golpe del cual el Mensana no pudo salir. Gimnasia intentaría responder con algunos cambios. Villalobos mandó a la cancha a David Fernández y Lucas González y con poco el Lobo quiso descontar. Y eso llegaría recién a los 42’ luego de un gran remate del ingresado Mario Rebeco que dejaría sin chances a García.

Cuando parecía que todo estaba liquidado, el partido aumentaba en dramatismo. El Lobo intentó con algunos centros en los últimos minutos pero no logró llegar al empate. Y para colmo, cuando se moría el partido, Morardo terminó de sentenciar el partido para sellar el 3 a 1.

Por momentos hizo un gran partido pero terminó con las manos vacías y la clasificación se complicó. Ahora deberá enfrentar a Argentino en San José y si el Lobo no saca los tres puntos, parecería que dejará de pensar en el ascenso.

EL ÁRBITRO: José María Garau (7). El colegiado tuvo una buena tarde y decidió correctamente en casi todas las jugadas. Sus líneas también estuvieron a la altura de las circunstancias y cumplieron con una labor excelente.

EL PÚBLICO: Atenas: Unas 2.000 personas llegaron al estadio 9 de Julio y alentaron a su equipo. En los minutos finales, cuando parecía que todo estaba liquidado, sufrieron con el descuento de Gimnasia, aunque terminaron festejando con el tanto de Morardo. Gimnasia: Un puñado de hinchas llegó a Río Cuarto con algunas banderas. Los 33 siempre se hacen presentes y esta vez no defraudaron.

Fuentes: Diario Uno, Los Andes y Mendozagol.com.ar. Foto: Diario Uno.