Con dos goles de su centrodelantero, el conjunto cordobés dejó en una situación comprometida a los tricolores, que continúan en zona de Promoción y deberán aguardar los resultados del fin de semana para conocer los resultados de sus rivales en la lucha por zafar de la equivalencia.
La goleada ante Cipolletti, el domingo pasado, fue apenas un espejismo. Villa Mitre cayó ayer 2-0 ante Estudiantes de Río Cuarto y su situación en la tabla acumulada del Argentino A es muy comprometida.
Pese a que desarrolló un primer tiempo interesante, pagó muy caro un error defensivo con el que se fue en desventaja al entretiempo y ya en el complemento se vio sometido al dominio local, que dio un paso muy importante para ponerse a refugio de todo riesgo.
Lo agarró mal parado.
Villa Mitre hizo un planteo táctico muy inteligente hasta los 38 minutos, cuando Estudiantes lo encontró mal escalonado y Andrés Aimar le puso una asistencia estupenda a Nicolás Gatto, quien en posición dudosa y con potente remate batió a Gerardo Cabral.
Hasta allí, el elenco tricolor, con un 3-5-2 elástico, había jugado de igual a igual y generado sus situaciones de riesgo, aunque Iván Agudiak (con un remate que dio en la parte externa de la red) y Rodrigo Sánchez (le entró mordido desde la puerta del área) no lograron cristalizarlas.
Estudiantes intentó apoderarse de la iniciativa, aunque la asfixiante presión de Cantoni (sobre Aimar), Kerman y Escudero (sobre el volante que llevara la pelota) y el ida y vuelta de Castellano por derecha y Fernando Fernández por izquierda, fueron problemas que no consiguió resolver, a tal punto que el local terminó buscando el pelotazo largo como única alternativa.
Sin embargo, en esa paridad, el dueño de casa halló su oportunidad y no la desperdició. Aimar quedó libre en el medio y metió un pase profundo con toda la defensa saliendo. Gatto picó habilitado y, totalmente solo, sometió a Cabral para estampar el 1-0, que pareció exagerado por lo mostrado por uno y otro elenco al cabo de los 45 minutos iniciales.
Lo justificó.
Pese a que Villa Mitre tuvo una situación muy clara para empatar en el arranque del segundo tiempo (José "Astolfo" Mancinelli se lució ante Rodrigo Sánchez y Diego Escudero en la misma maniobra), Estudiantes de Río Cuarto dominó claramente el trámite en esta fracción.
El gol de Gatto, cuando apenas habían transcurrido seis minutos y tras aprovechar un cabezazo en el poste de Zalazar luego de una muy bonita jugada colectiva, fue un golpe muy duro para el elenco de Sergio Benet, que no logró sobreponerse.
La nueva expulsión de Diego Escudero (la tercera en este tramo) terminó por desarticular a la escuadra visitante, que perdió gravitación en el mediocampo, por donde emergió la estampa de Aimar para manejar con claridad los tiempos del trámite.
De esa manera, el local estuvo más cerca de estirar diferencias que Villa Mitre de recortarlas, evidenciando lo que cada elenco mostró en la recta final del cotejo.
Fuente: www.lanueva.com