Fueron dos meses intensos. Reuniones, cruces de llamadas, negociaciones y viajes prolongados hasta Viamonte 1366. Pero a pesar de todo, el objetivo no llegó a buen puerto porque los clubes del interior que participarán en el Toreo Argentino A no consiguieron lo solicitado: un aumento en el presupuesto que la Asociación del Fútbol Argentino destina mensualmente por participar en la tercera categoría del fútbol argentino. Es decir, más allá de los numerosos intentos, las instituciones seguirán recibiendo 24 mil pesos por mes (NdR: los clubes metropolitanos que juegan en la Primera B reciben 120 mil pesos mensuales).

Pero el hecho no terminó con la reunión que mantuvieron el miércoles 28 de julio, Julio Humberto Grondona, los integrantes del Consejo Federal y los representantes de los clubes del interior. Después del conclave en el que Don Julio le transmitió la noticia negativa, los delegados, en una situación que no es común que ocurra, decidieron hacer un raid mediático con frases que marcarán un antes y un después para el futuro del fútbol del interior.

El primero que disparó munición gruesa fue el vicepresidente de Juventud Antoniana de Salta, Rubén González, quien sostuvo: “Grondona nos faltó el respeto a doce provincias. Acá en la AFA no existe el federalismo, no les importa el fútbol del interior ni la economía de los clubes”.

Contó además que Grondona les dijo: “a mí no me importa un carajo si ustedes juegan o no el torneo Argentino A, yo ya eché a Diego Maradona y no tendría ningún problema en hacerlo con ustedes”

Omar Sperdutti, presidente de Deportivo Maipú manifestó: “las personas que pensamos diferentes a Grondona somos tratados como traidores (en clara alusión a Talleres de Córdoba y Crucero del Norte de Misiones que se despegaron del resto da las instituciones). Y agregó: “Grondona debe saber que los clubes estamos fundidos, liquidados. Nos da ganas de no volver nunca más acá”.

Otro de los integrantes del grupo combativo (NdR: la línea dura de disputa estuvo compuesta principalmente por Unión de Sunchales, Central Córdoba de Santiago del Estero, Juventud Antoniana de Salta, Rivadavia de Lincoln, Deportivo Maipú de Mendoza, Sportivo Desamparados de San Juan y Cipolletti de Río Negro) que salió a disparar frente a Julio Grondona fue el presidente de la subcomisión de fútbol de Cipolletti, Horacio Pierdominici, quien expresó: "yo no tengo que decirle señor a este tipo que viene de la dictadura. Grondona les da importancia solamente a sus amigos. Los de la B Metropolitana, tienen subsidio de todo y juegan a diez cuadras”.

Para no ser menos y no quedar atrás en este cruce mediático la Asociación del Fútbol Argentina emitió un comunicado en su sitio web oficial donde expresó que “ninguna persona del Club Juventud Antoniana estuvo reunida con el presidente Julio Grondona”. Otro párrafo del comunicado decía que “los dirigentes que mantuvieron un diálogo a propósito del tema en cuestión, lo hicieron en el marco de la más absoluta cordialidad y respeto, tal como es costumbre en la AFA”.

Tras la regularización

Lo ocurrido en estos días deberá ser analizado por ambas partes. Desde la Asociación del Fútbol Argentino habrán tomado nota, más allá del manejo personalista de Grondona que dispone a su antojo el destino del fútbol argentino, que los clubes del interior están presentes en la estructura futbolística y la mayoría se han conformado en importante bloque para seguir disputando lo que para ellos es lo más justo: una distribución igualitaria de dinero. Al sostener que deben recibir lo que obtienen los clubes de la Primera B Metropolitana, más allá que el 50% de lo que reciben los clubes de Buenos Aires proviene de la televisión (NdR: T y C destina 14 millones de pesos anuales para transmitir los partidos, mientras que la productora Estadios destina alrededor de un millón de pesos).

Y el plan de acción integrado ha comenzado. El 28 de julio se conformó la Mesa Directiva del Torneo Argentino A. Presidida por Bernardo Abruzzese, vicepresidente de Central Córdoba de Santiago del Estero, la organización compuesta por veintidós de los veinticuatro que jugarán la competencia (no la integran Talleres y Crucero del Norte) tiene como propósito fundamental lograr objetivos a corto plazos en beneficio a los clubes de la categoría. 

Es un gran paso que han dado las instituciones. Pero desde ahora, si bien tienen necesidades inmediatas, deberán a trabajar de manera consensuada para proyectar soluciones a largo plazo. El fútbol del interior necesita empezar a ser considerado un andamiaje importante en fútbol nacional, pero para que esto suceda no sólo se necesita de la complacencia de Julio Grondona. También es necesario un trabajo más regularizado de los dirigentes que manejan los destinos de las instituciones.

Si bien es cierto que el número que reciben es exiguo, es ineludible que los clubes del interior hagan una fuerte autocritica puertas adentro y analizar cómo es el manejo presupuestario que muchas veces se excede y termina desestabilizando las arcas institucionales. Los ejemplos son numerosos y están a la orden del día.

Las necesidades urgentes de varios clubes del interior hicieron que el 2010 sea un año bisagra para el futuro de las instituciones del interior y donde, más allá de la negativa inicial, no es utópico pensar en un cambio. Pero para esto no sólo se dependerá del poder de Don Julio de Sarandí, sino también de la firmeza generalizada de quienes administran los clubes del Argentino A.

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