El estadio 9 de Julio recibió a casi 700 almas “albas” y “celestes” en una nueva edición del clásico por excelencia de la ciudad. Banderas, bombos y mucho aliento le dieron color y música a la noche riocuartense revitalizando un viejo duelo de Río Cuarto.
En este contexto, sólo seis efectivos policiales estuvieron en el estadio donde en principio no pudieron evitar un hecho violento. En pleno juego de tercera división, hinchas locales lanzaron piedras desde las afueras del estadio hacia los simpatizantes visitantes ubicados en su tribuna. Luego -con el juego de primera división- todo fue fiesta. Al final de la noche, se observaron varios móviles en las adyacencias del estadio “albo”.
Fotos: Al Toque
Redacción Al Toque