Triste amanecer de domingo. Esta mañana dejó de existir Aldo Domingo Arana. La “Mona” -a sus 71 años- llevó risas y goles al cielo. Extraordinario delantero que será recordado por siempre en el ámbito del futbol regional.

Uno de los grandes méritos, entre tantos, de Aldo Domingo Arana fue haber logrado que el paso del tiempo no borre la inmensa huella que dejó el fútbol de Río Cuarto. Su talento y su carisma fueron decisivos para transformarse en el goleador eterno. Aquellos que lo vieron jugar son implacables a la hora de definirlo futbolísticamente: “fue el mejor delantero que dio Río Cuarto” dicen algunos; “fue un goleador inigualable” manifiestan otros. Lo cierto es que la “Mona” cautivó el corazón de una generación que disfrutó de sus goles y de su calidad.

El cumpleaños del gol

Recuerdo de la nota realizada el 10 de febrero de 2014.

El recorrido futbolístico de Arana inició en el club de su barrio: Correos y Telecomunicaciones. Criado en el barrio Pizarro, la “Mona” comenzó a dar sus primeros pasos junto a una pelota de fútbol, su gran compañera. En el conjunto “postal” realizó las inferiores y compartió -según sus propias palabras– una infancia hermosa junto a un lindo grupo de amigos. “Correos era como mi casa. Ahí pasé momentos inolvidables con personas con las que todavía tengo relación”, nos contó en una realizada en mayo de 2014.

Luego de su aparición futbolística en Correos, Arana emigró a Buenos Aires para vestir la casaca de Independiente de Avellaneda. En el “rojo” llegó a jugar en cuarta división y aunque tenía las condiciones no llegó a primera división. Tras su paso por Independiente regresó a Río Cuarto para jugar en Asociación Atlética Estudiantes. “Jugar en Estudiantes fue cumplir un sueño que tiene todo jugador de fútbol riocuartense”, confesó Arana.  Al conjunto de Avenida España arribó en 1969 y permaneció hasta 1971 porque viajó hasta Córdoba en donde tuvo un breve pero significativo paso por General Paz Juniors.

El repaso de trayectoria: De monadas, bromas y goles 

 En ese momento de la vida deportiva de Aldo Arana en donde aparece un nombre en común que se repite coincidentemente en tres momentos diferentes. Se trata del nombre propio Santos Pérez. Fue el empresario Santos Pérez el que lo recomendó y lo llevó a Independiente de Avellanada; en Asociación Atlética Estudiantes lo dirigió el profesor Santos Pérez mientras que en General Paz Juniors de Córdoba el ayudante de campo también se llamaba Santos Pérez. “Pensé que me perseguían. Era muy gracioso porque a cada lugar que iba siempre había un Santos Pérez y siempre era una persona diferente”, nos describió la “Mona” con el humor de siempre.

El día que Atlanta bailó en Río Cuarto al ritmo de la "Mona”… Arana

Fue un 2 de marzo de 1972. Una tercera especial reforzada del “bohemio” debió rendirse a los pies de Aldo Domingo y sus goles. Casi una década antes, el equipo de Villa Crespo se presentó en la ciudad en un amistoso ante la Selección de Río Cuarto. 

En la entidad de Avenida España permaneció hasta 1975 y por lo goles y títulos obtenidos (1969, 1971 y 1973) siempre será recordado por el memorioso simpatizante “celeste”. Pero sin dudas el gran momento deportivo de Aldo Domingo Arana fue su gran performance junto a la Selección de la Liga Regional de Fútbol de Río Cuarto. El conjunto dirigido por Norberto Carrizo se consagró campeón del Campeonato Argentino de 1973 y la “Mona” fue una de las figuras excluyentes transformándose en el goleador del equipo con doce goles.

La jornada consagratoria de Arana y el equipo regional fue el 22 de diciembre de 1973 en el estadio 9 de Julio de Sportivo y Biblioteca Atenas. En el cotejo decisivo los dirigidos por Carrizo vencieron 3 a 1 a la selección de San Juan y levantaron la Copa Beccar Varela. Esa noche el delantero anotó dos goles claves. “Ese equipo era una familia y por ese motivo sabía que íbamos a ser campeones. Pasamos momentos muy difíciles, pero pudimos reponernos por lo consolidado que estaba el grupo. Lo bueno es que nos hicimos tan amigos que hasta el día de hoy tenemos una excelente relación y somos todos amigos”, recordó con emoción en aquella charla de 2014.

 Un grito nacional

Un 22 de diciembre de 1973 el seleccionado de la Liga Regional de Río Cuarto venció 3-1 a San Juan en cancha de Atenas y se coronó campeón argentino del torneo de ligas.

Damos fe que cada juntada de ese grupo de 1973 sintetiza en gran parte el valor de la palabra amistad. Hasta sus últimos días Aldo Arana luchó contra el rival más duro que le tocó enfrentar, como un férreo defensor de años atrás, el mal de Parkinson. El 14 de junio nos dejó Aldo Domingo Arana y nos quedan sus goles y esa sonrisa cómplice que contagiaba una alegría única, sana, que nunca olvidaremos.

Gráfico: Al Toque

Redacción Al Toque